Pero hizo el esfuerzo, Lord Mago, y hay que premiarlo porque las aspirantes tienen sus encantos a flor de piel, brotándoles a montones. Y de todo hay como en botica.

Esta, por ejemplo, muestra que la delgadez manda. Basta que sea proporcionada y puede con cualquiera.



A ésta la he visto varias veces, pero en el momento no recuerdo su nombre. Tiene un buen cuerpo, su rostro es agradable y el rojo le sienta bien.



Que puede uno decir con el espectáculo de semejante trasero. Mirar, pasar saliva y confiar en encontrársela un día de estos.



Preciosa en todo el sentido de la palabra esta rubia. Como las orientales (recuerdo a la tailandesa Amy,) lo tiene pequeño y para que vean, le agrega belleza. Me encanta.



De esta rubia me encanta la piel, se ve muy tersa y pese a que sus tetas son tamaño doble litro, se le ajustan bien, aparte de que con semejante tranca, atraviesa lo que se le ponga por delante. Se las trae esta rubia.



Esta si la veo como simplona, desabrida, sin gracia. Como que no tenía nada más que hacer, y decidió tomarse esta foto. Paso.



Para que vean que, aún en peligro de extinción, los tigres de Bengala siguen por ahí, campantes, en espera de su cazador furtivo. A esta tigresa me le apunto. Grrrrrrr.



Me encanta la pose de ésta. Es sofisticada, sabe que registra bien en la cámara y pone lo suyo. ¿Quién es? Tiene la pinta de ser una rusa. Confieso mi ignorancia.



El látex es fantástico. Y en este caso, el amarillo le sienta a la rubia. Muy buena elección para cerrar este desfile.



Un pretexto para mostrar belleza a granel y alegrarnos el rato.