Estados Unidos volvió a salir este martes en defensa del uso del glifosato en el combate contra los cultivos ilícitos, pero insistió en que respaldará a Colombia si decide suspender la fumigación aérea con este químico.Así lo ratificó el embajador de ese país en Bogotá, Kevin Whitaker, quien aseguró que la decisión de suspender el uso del glifosato es soberana, pero que debe tomarse con base en la múltiple evidencia científica que hay en el mundo en torno a este tema.
Whitaker afirmó que “pase lo que pase vamos a estar del lado de Colombia”, ya que “usar o no usar glifosato es decisión sobreara del Gobierno de Colombia y respetamos eso plenamente”.
Washington también dejó claro que hay mucha evidencia científica que permite concluir que el uso del glifosato es seguro, y que por eso se utiliza en Estados Unidos y en algunos países de Europa.
“Es un implemento muy eficaz y la decisión, que es del Gobierno, se debe dar con base en la evidencia científica”, precisó el diplomático, quien, no obstante, dejó claro un mensaje: “Si crece la coca en el país, eso será malo para Colombia y malo para Estados Unidos”.
Este debate se abrió luego de que el ministro de Salud, Alejandro Gaviria, sugiriera suspender el uso del glifosato, ya que hay evidencia científica que demuestra las consecuencias negativas de su uso, especialmente en lo dicho por un reciente informe de la Organización Mundial de la Salud sobre el tema.
Pero según dijo este martes el Embajador de Estados Unidos, quien respetará la decisión que adopte Colombia, “se ha demostrado que el glifosato es muy eficaz en parar el crecimiento de la coca en el país, es un implemento muy fuerte”.
Los pronunciamientos de Whitaker se dieron al cierre del comité que revisó los avances del ‘Plan de Acción para la Igualdad Étnica y Racial entre los Gobiernos de Colombia y Estados Unidos’, cuyo objetivo principal es reconocer y potenciar la cultura de los pueblos indígenas y afrodescendientes.