haciendo el amor en el carro, terminamos Pillados por la policía

Resulta que nos encontramos con mi novia, mi suegro nos prestó el carro. Ibamos a ir a cine, pero nos quedamos como una hora en el parqueadero de villacentro besándonos. El ambiente iba mejorando segundo a segundo, se iba haciendo más intenso, más romántico y más erótico. Inicialmente mis manos estaban en su cara, ahora estaban acariciando sus senos. Sus manos me abrazaban, luego estaban en mi espalda, pero tocándome de una manera tal, que parecía que quería arrancarme la camisa.
Decidimos irnos de ahí. Pero como la idea era no ponernos a dar muchas vueltas, buscamos un lugar medio solo cerca a la via, en un barrio que se llama serramonte, y ahi seguimos lo que minutos atrás había empezado. Con mucho afán le quitaba la blusa, le besaba los senos, el cuello, la mordía, ella hacía un gemido de placer que solo me excitaba más. Pero estabamos dentro un automóvil, así que lo único que restaba era buscar la mejor posición. Ninguno lo había hecho antes dentro de un carro. Y finalmente nos hicimos en el asiento del copiloto, totalmente reclinado, ella encima mio. Nos besabamos con mucha intensidad mientras hacíamos el amor, nunca había sentido algo así. Pasaba una que otra moto, pero rápido y no creo que nos vieran. Al comienzo, cada que veíamos una luz a lo lejos nos deteníamos, pero luego ya no importaba. Hasta que llegó un momento horrible que mató la pasión de la noche. Escuchamos una moto acercarse, y en cuestión de segundos la moto estaba parqueada al lado nuestro, y una luz de linterna mostraba el interior del carro. Era la policía. No llegan cuando roban a alguien, no llegan a controlar el tráfico caótico de esta ciudad, pero si pudieron llegar a terminar de manera abrupta tan maravilloso momento. Uno de los agentes de manera insistente golpeaba el vidrio pidiendo que nos bajaramos, mi novia se tapaba la cara y yo le hacía señas que se esperara, que ya me bajaba. Cuando dejó de contemplar el cuerpo maravilloso de mi novia, y me vio diciendole que ya me bajaba, se hizo con el otro policia detrás del carro. Me bajé, y me dijeron que eso era prohibido, y que teníamos que ir a la estación. Yo solo pensaba en el problema tan tenaz que ibamos a tener con mis suegros, así que les pedi a los agentes que me ayudaran, que no era ningun delito y que me dijeran en que les podia ayudar. Uno de los agentes me dijo; "tengo que arreglarle algo a la moto, necesito 2", número que hizo con su mano derecha. En ese momento pensé que 20.000 pesos era razonable, incluso hasta barato. Seguramente el policia valoraba el hecho de haber podido disfrutar visualmente a mi novia un rato. Pero cuando le pregunte a que valor hacia referencia, dijo que eran 200.000 pesos. Me dio mucha rabia, pero no iba a a arriesgarme a tener problemas con la familia de mi novia, asi que acto seguido, fui a mi billetera (que tenia plata porque ibamos a salir), y le di los 200.000 al tombo.
Desde entonces, cuando estamos en el carro solo nos damos uno que otro piquito, y cuando vamos a dar rienda suelta a nuestra pasión, nos aseguramos de que nadie pueda interrumpir.