DT de Brasil dice que Pékerman le dio a la Selección Colombia lo que le faltaba

Los grandes equipos no sólo tienen jugadores talentosos. En sus genes está escrita la victoria y por ello no dejan de luchar hasta que el árbitro pita el final del partido. Colombia nunca ha creído en sus capacidades, y ha arrastrado desde siempre un complejo de inferioridad que les hace bajar los brazos ante la primera dificultad o les crea una burbuja cuando llegan los triunfos, creyéndose los mejores del planeta.

Dicen que el que no ha visto a Dios cuando lo ve se espanta y por ello los triunfos del pasado los asumimos como milagros de pobre, que se gana el premio mayor, dilapida la fortuna en pocos meses y regresa a la realidad más pobre que antes.

Pekerman, que sabe lo que es ganar mundiales, que además tiene en su ADN incrustado el verdadero significado de la victoria y de la derrota, de lo que es subir una cuesta y permanecer en la cumbre, le está dando eso a los jugadores colombianos. Las victorias llegan, pero sólo si se trabaja con juicio, con disciplina, con entrega.

A la par con eso, tuvo la suerte de encontrar una camada de buenos jugadores que saben lo que es ganar trofeos internacionales, brillar en la élite del fútbol, participar de la gloria y el fracaso. Jugadores maduros y fogueados que han aprendido a manejar la disciplina de la táctica sin abandonar su creatividad.

Pekerman hace la diferencia.