Sebastian Vettel se corona campeón de la F1 en Japón

Sebastian Vettel es ya matemáticamente campeón del mundo de Fórmula 1, su segundo título consecutivo. El alemán finalizó tercero en una carrera ganada por Jenson Button, el segundo en la general. El español Fernando Alonso les acompañó en el podio como segundo.

El joven piloto de Red Bull, de 24 años, no sabe especular. Es ambicioso y lo demuestra con números; le bastaba un punto y logró 15 en Suzuka. Y demostró su hambre desde la salida, cerrando el paso a Button, su principal rival, de tal forma que se ganó una reclamación del británico por radio, pero no hubo sanción.

Advertencias al margen, el germano empezó marcando el ritmo desde el inicio y vuelta a vuelta sacaba distancia a sus rivales. El incidente con Button relegó a este a la tercera plaza en beneficio de Hamilton, pero la alegría le duró ocho vueltas al campeón de 2008, hasta que tuvo problemas con los neumáticos y se vio obligado a adelantar su primer paso por 'boxes'.

El español Fernando Alonso también aprovechaba para adelantar a su compañero de equipo, Felipe Massa, a pocas vueltas del inicio. Hamilton fue el primero, pero todos hicieron el primer cambio en torno a la vuelta diez, tras la cual salió más beneficiado Alonso, que se puso tercero tras Button.

El británico empezó a marcar los mejores tiempos con los segundos neumáticos blandos y recortaba algo de distancia con Vettel. Pero la tortilla dio la vuelta al siguiente paso por 'boxes', con el último juego de neumáticos blandos, cuando Button aprovechó para salir del 'pit lane' por delante de Vettel.

El más perjudicado fue Hamilton, que salió por detrás de Massa. Ambos se tocaron antes de la entrada a 'boxes' y un trozo del alerón del inglés provocó la salida del coche de seguridad. Uno de los beneficiados fue Alonso, que se puso a rueda de Vettel gracias al frenazo.

Button se marchaba en los tiempos, marcando las vueltas rápidas por debajo de 1:38, y metía presión a Vettel, que se vio obligado a arreisgar y puso el primero de todos los neumáticos duros. Tras él, su compañero Webber, que iba detrás de Alonso.

El asturiano alargó su parada y logró salir por delante de Vettel, a pesar de que el teutón ya empezaba a marcar vueltas rápidas y rebajaba los 1:37. Tocaba aguantar el acoso de un campeón enfurecido, que se veía por primera vez rebasado por sus rivales; aunque quizá fuera tarde para el campeonato.

Por detrás, Hamilton le devolvía la pasada a Massa en su guerra particular; no son los mejores amigos. Y la vuelta rápida era para el mexicano Sergio Pérez con 1:36.569, mera anécdota aunque finalizó en un meritorio octavo puesto.

Los doblados dieron algo de aire al español, que libre del acoso de Vettel y con los neumáticos ya más calientes se fue a por Button en un alarde de casta que parecía casi misión imposible; Ferrari contra McLaren. En Red Bull daban instrucciones a sus pilotos para no arriesgar; la guerra ya no iba con ellos.

Button contestó al acoso de Alonso con el récord del circuito, marcando 1:36 568, tan solo una milésima menos que Pérez.