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Discusiones Generales » Secreto masonico › iniciación de jesús en el templo de heliópolisParticipa en el tema Secreto masonico › iniciación de jesús en el templo de heliópolis en el foro Discusiones Generales. |
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Secreto masonico › iniciación de jesús en el templo de heliópolis
Calificación: de
5,00 A continuación una parte del libro de la iniciación Masonica Basadas en la enseñanzas secretas de jesus a sus discípulos entre otro libros gnósticos secretos Como Phithis Sophia Y habla quien es realmente Fatima todos estos adjudicados a jesus. JESÚS RECIBE DEL HIEROFANTE SU NOMBRE Y NÚMERO MÍSTICOS, SUFRE LA PRIMERA PRUEBA DE LA FRATERNIDAD Y RECIBE EL PRIMER GRADO: LA SINCERIDAD P. D. OUSPENSKY CAPITULO I Jesús quedóse en Zoan por algún tiempo; y después fue a la ciudad del sol, que los hombres llaman Heliópolis y pidió ser admitido en el Templo de la sagrada Familia. El Consejo de la Fraternidad reunióse y Jesús Púsose de pie ante el hierofante; él contestó todas las preguntas que le fueron hechas con la claridad y con firmeza; el hierofante exclamó: Rabboni del rabinato, ¿por qué encuentras tú aquí? Tu sabiduría es la sabiduría de los Dioses, ¿Por qué buscas sabiduría en los templos del saber humano? Y Jesús dijo: en todos los caminos de la vida terrenal yo debo andad; en todos los templos del conocimiento debe sentarme; a las alturas que cualquier hombre ha escalado, a esas debo llegar. Con lo que cualquier hombre ha sufrido, yo debo confrontarme, para que pueda yo conocer los dolores, las desilusiones y las violentas tentaciones que sufre el hombre mi hermano, a fin de que pueda saber precisamente cómo debo auxiliar a aquellos que han de menester ayuda. Yo os ruego, hermanos, me permitáis penetrar en vuestras oscuras criptas; y yo sufriré aún las más duras de vuestras pruebas. El maestro dijo: Presta pues, el juramento de la fraternidad secreta. Y Jesús prestó el juramento de la secreta Fraternidad. De nuevo el maestro habló y dijo: Las mayores alturas son conquistadas por aquellos que descienden a las mayores profundidades; y tú descenderás a las más grandes profundidades. El guía entonces condújole y en la fuente del templo Jesús se bañó, y cuando le fue puesto el vestido apropiado, quedó de nuevo de pie ante el hierofante. El maestro tomó de la pared un pergamino en el que estaban escritos el número y el nombre de cada atributo y característica distintiva. Y dijo: El círculo es en símbolo del hombre perfecto y siete el número del perfecto hombre. El Logos es el verbo perfecto; el que crea: el que destruye y el que salva. Este maestro hebreo es el logos del Santo Uno, el Círculo de la humana raza, el Siete del tiempo. Y en el libro del registro el escriba puso: El Logos-Círculo-Siete; y así fue Jesús conocido. El maestro dijo: Ponga atención el Logos a lo que voy a decir: Ningún hombre puede entrar en la luz, sino hasta que se ha encontrado a sí mismo. Ve y busca hasta que hayas encontrado tu alma y entonces vuelve. El guía condujo a Jesús a una sala en la que la luz era débil y suave, como la luz del día a la hora del alba. Las paredes de la sala tenían pintados místicos signos, hieroglíficos y textos sagrados; y en esta Cámara Jesús se encontró sólo y en ellas permaneció algunos días. Él leyó los textos sagrados; meditó los significados de los hieroglíficos y trató de penetrar la importancia de la recomendación del maestro: Encontrarse a sí mismo. Una revelación vino: él se puso en contacto con su alma; él se encontró a sí mismo; desde ese momento él no estuvo sólo. Una noche, en que él dormía, a media noche, una puerta invisible se abrió y un hombre vestido con un traje oscuro, entró y dijo: Hermano mío, perdóname por venir en esta hora inoportuna; pero he venido a salvar tu vida. Tú eres víctima de una cruel intriga. Los sacerdotes de Heliópolis están celosos de tu celebridad y han dicho que tú no saldrás vivo de estas criptas sombrías. Los grandes sacerdotes van al mundo a enseñar y tú estás sentenciado a servir en el templo. Ahora bien, si tú quieres quedar en libertad, debes engañar a estos sacerdotes, debes decirles, que tú estás deseoso de permanecer aquí toda tu vida; y entonces, cuando tú hayas obtenido todo lo que deseas tener, yo regresaré y por un pasillo secreto te haré pasar para que puedas ir en paz. Y Jesús dijo: Hermano mío, hombre, ¿Es posible que tú vengas aquí a enseñarme la falsedad? ¿Estoy yo dentro de este sagrado recinto para aprender la astucia de la vil hipocresía? No, hombre, mi Padre desprecia la falsedad y yo estoy aquí para hacer su voluntad. ¿Engañar a estos sacerdotes? ¡Jamás! Mientras el sol luzca. Lo que he dicho, dicho está: YO SERE FIEL A ELLOS, A DIOS Y A MI MISMO. Y entonces el tentador salió y Jesús quedó de nuevo sólo; más a poco tiempo, apareció un sacerdote vestido de blanco y dijo: ¡Así está bien! El Logos ha prevalecido. Esta es la cámara de prueba de la hipocresía. Y entonces él echó a andar y Jesús quedó de pie ante el banquillo del juicio. Y todos los hermanos pusiéronse de pie; el hierofante adelantóse y, colocando su mano sobre la cabeza de Jesús, puso en sus manos un pergamino en el que había escrita una sola palabra: SINCERIDAD; y no se pronunció ni una sola palabra más. El guía de nuevo apareció y mostróle el camino y en una sala espaciosa, llena de todo lo que un estudiante puede apetecer, Jesús invitado a descansar y a esperar. JESÚS SUFRE LA SEGUNDA PRUEBA DE LA FRATERNIDAD, Y RECIBE EL SEGUNDO GRADO: JUSTICIA CAPITULO II El Logos no se cuidó de descansar; él dijo: ¿Qué necesidad tengo de esperar en esta suntuosa sala? Yo no necesito descansar; el trabajo de mi Padre apremia. Más bien quería seguir adelante y aprender todas las lecciones. Si debe haber pruebas, que vengan, porque cada victoria que se tiene sobre el “yo”, se traduce en mayor fortaleza. Entonces el guía le llevó consigo y en una cámara oscura como la noche, Jesús fue dejado sólo; y muchos días pasó él en esta profunda soledad. Y Jesús durmió y, en la profunda calma de la noche, abrióse una puerta secreta, y dos hombres entraron, vestidos de negro, y cada uno llevaba en la mano una pequeña y vacilante lámpara. Uno de ellos aproximándose a Jesús, dijo: Joven, con todo nuestro corazón nos condolemos por lo que tú sufres en estos antros terribles y hemos venido a ti, como amigos, para traerte luz y mostrarte el camino que ha de conducirte a la libertad. Nosotros, como tú estás ahora, en una ocasión estuvimos encerrados en estos antros y creímos que por estos fantásticos y misteriosos medios podríamos llegar a la felicidad y al poder. Pero, afortunadamente, vino el momento en que nos desengañamos y, haciendo uso de toda nuestra fuerza, rompimos nuestras cadenas, y entonces supimos que todo este servicio es corrupción disfrazada. Estos hombres no son otra cosa que criminales que en estos antros se ocultan. Ellos hacen alarde de sus ritos y holocaustos; ellos ofrecen a sus dioses, pobres aves y bestias; si, aún niños, mujeres y hombres, quemándolos vivos. Y ahora te tienen aquí y, en cierto momento te ofrecerán en holocausto. Rogámoste, hermano, rompas tus cadenas; ven y márchate con nosotros; acepta la libertas que te ofrecemos, ahora que aún es tiempo. Y Jesús les dijo: Vuestras pequeñas candelas muestran la luz que traes. Os ruego me digáis ¿Quiénes sois vosotros? Las palabras de un hombre no valen mas de lo que vale el hombre mismo que las pronuncia. Las murallas de este templo son sólidas y altas; decidme: ¿cómo entrasteis a este lugar? Los hombres contestaron: Bajo estas murallas hay muchos caminos ocultos, y nosotros, que hemos sido estudiantes, y hemos permanecido por meses y años dentro de estos antros, les conocemos todos. Entonces, vosotros sois traidores, dijo Jesús. Un traidor es un espíritu malo; aquel que traiciona a otro hombre jamás puede ser digno de confianza. Aquel que no ha pasado del plano se la traición, ama la falsedad y traicionará a un amigo para servir a su “yo” egoísta. Atended, vosotros, hombres o lo que seáis, vuestras palabras no hacen impresión alguna en mí. ¿Podría yo prejuzgar a este centenar de sacerdotes, hacerme traidor a mí mismo y a ellos, a causa de lo que decís, confesando vuestra traición? Ningún hombre puede juzgar por mí y si yo juzgara sin poseer todas las pruebas, yo no podría juzgar con justicia. No, hombre, por el camino que habéis seguido para venir, volveos. Mi alma prefiere la oscuridad de la tumba a las lucecillas vacilantes, como las que traéis. Mi conciencia impera, lo que éstos, mis hermanos, tienen que decirme, yo lo escucharé, y cuando tenga todas las pruebas, yo decidiré. Vosotros no podéis juzgar por mí, ni yo por vosotros. Idos, hombres, idos, y dejadme en esta luz encantadora; porque aún cuando el sol aquí no luce, dentro de mi alma hay una luz que sobrepasa a la del sol o a la de la luna. Entonces con un fiero ademán, cual si hubiera querido hacerles daño, los astutos tentadores salieron, y Jesús quedó de nuevo solo. Nuevamente apareció el Sacerdote vestido de blanco, venido para indicar el camino, y Jesús quedó otra vez de pie, ante el hierofante. Y no se pronunció ni una sola palabra, mas en sus manos el maestro puso un pergamino en el que la significativa palabra, JUSTICIA, estaba escrita. Y Jesús dominó a las formas fantásticas del prejuicio y de la traición. JESUS HACESE DISCIPULO PRIVADO DEL HIEROFANTE Y ESTE LE ENSEÑA LOS MISTERIOS DE EGIPTO. AL SUFRIR LA SEPTIMA PRUEBA, TRABAJA EN LA CAMARA DE LOS MUERTOS. CAPITULO VII El curso superior de estudios comenzaba, y Jesús entró e hízose discípulo del hierofante. El aprendió los secretos de la ciencia mística de la tierra de Egipto; los misterios de la vida y de la muerte y de los mundos que están más allá del disco del sol. Cuando él hubo terminado todos los estudios del curso superior, fue llevado a la cámara de los muertos, para que pudiera aprender los antiguos métodos seguidos para preservar de la destrucción a los cuerpos de los muertos; y en esa cámara el trabajó. Y los portadores trajeron el cuerpo del hijo único de una viuda, para ser embalsamado; la madre, llorosa, seguía de cerca el cuerpo; su dolor era grande. Y Jesús dijo: Buena mujer, seca tus lágrimas; lo que tú vas siguiendo no es sino una casa vacía; tu hijo no está en ella. Tú lloras, porque tu hijo está muerto. Muerte es una palabra dura; tu hijo no puede morir jamás. El tuvo una labor que le fue dada a hacer en la vestidura carnal; él vino a hizo su trabajo; y entonces hizo a un lado la carne; él ya no la necesitó más. Más allá de donde alcanza ti mirada humana, él tiene otro trabajo que hacer, y él lo hará bien; y entonces pasará a otras labores, y, después, alcanzará la corona de la vida perfecta. Y lo que tu hijo ha hecho, y lo que aún debe hacer, todos nosotros debemos hacerlo. Ahora bien, si tú albergas el dolor y expresas tus tristezas, ellas serán mayores cada día. Ellas absorberán tu vida misma, hasta que, por fin, tú no serás más que dolor anegado en amargas lágrimas. En lugar de ayudarle, tú hieres a tu hijo con tu dolor profundo. El busca consolarte y alegrarte como siempre lo ha hecho; él está contento cuando tú estás contenta; el está entristecido, cuando tú t entregas al dolor. Ve y entierra tus pesares y sonríe al dolor, y olvídate de ti misma, ayudando a otros a enjugar sus lágrimas. La mujer llorosa volviese y partió para hallar la felicidad en el servicio a los demás; ella fue a enterrar profundamente sus tristezas en un ministerio de alegría. Entonces, otros portadores llegaron, trayendo el cuerpo de una madre a la cámara de los muertos; y un solo doliente la seguía: era una niña de tierna edad. Y cuando el cortejo se acercaba a la puerta, la niña observó a un pájaro herido que se debatía convulso; la flecha de un cruel cazador había traspasado su pecho. Y ella dejó de seguir a la muerta, y acudió en ayuda del pájaro que aún vivía. Y Jesús díjole: ¿Por qué abandonas a tu muerta para salvar a un pájaro herido? La niña exclamó: este cuerpo sin vida, no necesita de mi ayuda alguna; más yo puedo ayudar a aquel en que hay aún vida; mi madre me enseñó esto. Mi madre me enseñó que el dolor y el amor egoísta, así como las esperanzas y los temores, no son sino reflejos del “yo” inferir. Que las sensaciones que sentimos no son sino pequeñas ondulaciones sobre la gran ola de la vida. Todas esas cosas son perecederas; todas ellas son irreales. Las lágrimas brotan de los corazones de la carne; el espíritu nunca llora; y yo anhelo el día en que he de andar en la luz, en que las lágrimas serán enjugadas. Mi madre me enseñó que todas las emociones no son otra cosa que el rocío que sube de los amores, esperanzas y temores humanos; ella me enseñó que la perfecta felicidad y bienaventuranza no pueden ser nuestras, sino hasta que hemos vencido todas esas emociones humanas. Y en presencia de aquella niña Jesús inclinó su cabeza reverentemente. El dijo: Durante días, meses y años, he tratado de aprender esta elevada verdad que el hombre puede aprender en la tierra, y aquí, una niña, venida ha poco a este mundo, la ha expresado toda en unas cuantas palabras. No es maravilla que David dijese: ¡OH, Señor, nuestro Señor, cuan excelente es tu nombre en toda la tierra! De la boca de los pequeños, y de los niños de pecho, has decretado la fuerza. Y entonces él puso su mano sobre la cabeza de la niña y dijo: Seguro estoy de que las bendiciones de mi Padre Dios, vendrán sobre ti, ¡OH niña! Y quedarán contigo para si Última edición por Anonymus666x; 10-12-2013 a las 13:46:22 | ||
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No Calculado | #1.5 |
SponSor | Re: Secreto masonico › iniciación de jesús en el templo de heliópolis |
10-12-2013 , 13:54:36 | #2 |
Staff Retirado Con Honores Denunciante Dorado | Respuesta: Secreto masonico › iniciación de jesús en el templo de heliópolis
Se mueve a sub-zona: Libros poesias y escritos, por carecer de contenido paranormal, misterioso o enigmatico.
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10-12-2013 , 15:03:22 | #3 |
Denunciante Constante | Respuesta: Secreto masonico › iniciación de jesús en el templo de heliópolis
Y quien le garantiza a uno q esto es real y no lo escribio por ahi cualqier loco d la antiguedad?
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10-12-2013 , 20:16:18 | #4 | |
Staff Retirado Con Honores Denunciante Dorado | Respuesta: Secreto masonico › iniciación de jesús en el templo de heliópolis Cita:
Es real porque está posteado y lo puedes leer, entonces por simple lógica existe, ahora, lo referente al autor, existen muchos escritos apócrifos, o anónimos, y se encuentran hasta en museos inclusive se desconoce su significado por ser una lengua desconocida, así que por eso no se puede soslayar por ello, vale decir, que si un tal Kamarada escribe un escrito es un desconocido tambien, por ultimo, creo que debes recordar que la bandera que distingue este foro es.............Comunidad en linea para expresar lo que ni puedes en otras partes.......................... ] | |
Etiquetas |
conspiracion, enigmas, gnosticos, jesus, misterios |
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