El Amazonas colombiano es un destino increíble para los turistas que buscan tener contacto extremo con la naturaleza y conocer algunas de las culturas más representativas del país. Este maravilloso hábitat acoge tantas especies de fauna y flora como ningún otro ecosistema en el mundo y es un lugar sorprendente no sólo por la diversidad cultural de sus pueblos indígenas, sino por la vida que se origina y se nutre de las múltiples orillas del río Amazonas, el más caudaloso, ancho y profundo del mundo. Como gigantescas venas, por esta región atraviesan majestuosos ríos que facilitan transacciones comerciales y desplazamientos hacia lugares mágicos en medio de la selva, poblaciones apartadas, resguardos, parques y reservas naturales. Los grupos indígenas conceden a este territorio una multiplicidad étnica incomparable. Conocer sus rituales, cultura y creencias, interactuar con los líderes de las comunidades y comprender su relación con la naturaleza es una experiencia mágica que evoca un cuento de fantasías.
Este destino es propicio para disfrutar de una increíble travesía; escalar árboles de 35 metros de altura, deslizarse entre sus ramas en un recorrido de más de ochenta metros para sentir la fuerza de la naturaleza; pasar la noche en la copa de una Ceiba y escuchar la voz de la jungla y sus más profundos secretos a la luz de la Luna.
Amazonas es uno de los 32
de
, ubicado en la parte más meridional del país, en gran parte al sur de la
. Es el departamento colombiano más grande en cuanto a extensión territorial y se compone en su totalidad de territorio de la
. Su parte septentrional está limitada a los departamentos de
y
y al noroeste con el departamento del
. El resto de su territorio es de frontera internacional: al este con
y al sur y sureste con el
. Amazonas es el departamento con mayor longitud en límites internacionales del país.
La porción meridional del departamento, al sur del
, se denomina "
", el cual incluye la triple frontera de Colombia,
y
, el acceso colombiano al
—su límite sur—, y la capital del departamento, la ciudad de
.
El nombre del departamento procede del nombre del gran
. El río a su vez fue así denominado por el conquistador
(
-
), el cual, en su viaje de exploración, dijo que fue atacado por "feroces mujeres" que se le semejaron a las
de la
; sin embargo, la existencia de una tribu guerrera femenina en tal tiempo no ha podido ser demostrada y es posible que fuesen guerreros amerindios de pelo largo los que impresionaron al conquistador por el cual denominó a las selvas y al río con el nombre de
Amazonas.
Como Departamento, el Amazonas es uno de los más recientes en
. Hasta
era parte de los llamados "Territorios Nacionales" del
, una entidad bastante discutida, pero eliminada con la redistribución territorial de la nueva Constitución Política. Es quizá uno de los departamentos colombianos en donde se ha conservado con mayor gracia la presencia de los pueblos amerindios de la familia lingüística
.
Entre los primeros exploradores europeos del territorio está
, quien le daría el nombre a la selva. La
pondría el territorio forestal bajo el dominio de la
, pero la independencia de las colonias españolas desataría un ánimo expansionista de las nuevas repúblicas hermanas, especialmente el
y
.
, más concentrada políticamente en la
, perdería una gran parte del territorio amazónico.
En
el Amazonas hizo parte del
, el cual comprendía desde
hasta territorio del actual
durante la existencia de
. En 1858 ya pertenecía al
, que era parte del
; con la reforma constitucional de 1886 el Estado Soberano del Cauca se convierte en el
. Entre los años 1920 y 1930, Colombia y Perú legitiman su frontera por medio del
, en el cual ambas repúblicas se reparten los territorios comprendidos entre los ríos Caquetá y Napo. Dentro de estas se le cede a Colombia el
, donde obtiene Leticia, ciudad amazónica fundada por colonos peruanos.
La capital del Amazonas colombiano es Leticia, una ciudad hospitalaria y confortable, que además es un activo centro de comercio y está rodeada por caminos que conducen a la espesura del bosque y a sitios apartados en los que es posible practicar turismo ecológico y de aventura.
Al interior de la selva del Amazonas habitan diferentes comunidades aborígenes como los Ticunas, Huitotos, Camsás, Yaguas, Nukaks, Tucanos e Ingas que conviven con la naturaleza y hacen de ella su principal fuente de recursos.
Con un total de 28 resguardos, las tradiciones culturales de los pueblos indígenas presentes en el departamento se han mantenido para honrar la historia y el encanto de este paraíso ecológico.
Para los amantes del turismo ecológico y de aventura, esta región advierte un gran número de actividades como escalar árboles, realizar caminatas en la selva, practicar canopy, navegar por el río Amazonas, observar fauna y flora o partir en una travesía fluvial hasta lugares remotos y prohibidos en el corazón de la selva.
Otro de los mayores atractivos de la zona son los parques naturales que ofrecen una experiencia única a los turistas para observar la majestuosidad de la fauna y flora amazónicas. Entre ellos se encuentran Cahuinari, Río Puré y Amacayacu, en donde es posible realizar caminatas por senderos y trochas de la selva tropical, recorridos acuáticos y avistamiento de aves.
Además de los parques naturales existen otros circuitos turísticos como la Isla de los Micos y el municipio de Puerto Nariño, en donde se pueden observar los delfines rosados, el caimán negro y la planta acuática representativa del Amazonas llamada Victoria Regia, este loto llega a medir hasta 1.50 metros de diámetro y es considerado el más grande del planeta.