Trabajando en una lavanderia

Tal como está la situación laboral actual es casi pecado quejarse, pero se aprovechan de tal manera que es casi lo que queda.
Llega el verano y sube el trabajo, lo que no sube mucho es el personal contratado, lo cual puede ser normal, sólo oír las condiciones y te dan ganas de echarse a correr.

De mano, no se sabe bien el horario laboral, te dicen la hora de entrada pero no la de salida, se sale cuando se acaba el trabajo del día, con lo que te encuentras con jornadas de 10-12 e incluso 13 horas (y subiendo), con una sola parada de 15 minutos para el pincho y pudiendo salir a la 1-2-3 de la madrugada (habiendo entrado a las 3 de la tarde), el precio de la hora extra es de 5€, obviamente no van en nómina.
Sólo en una semana se hicieron unas 23 horas extras, obviamente no están en nómina, que tampoco suelen entregar y sigo esperando cobrar.
Lo mejor viene cuando llega el viernes, no sabes a la hora que sales y el sábado tienes que entrar a las 9 de la mañana, lo de 12 horas entre jornada y jornada no se lleva, decir que el sábado entras a las 9 de la mañana y sales a las 10 de la noche ¿jornada de 13 horas? Parece que si es legal.

No facilitan ropa laboral, se comparten las batas (hasta que te haces con una) y los guantes son los que aparecen olvidados en prendas de clientes, de ducha ni hablamos.

Para la campaña de verano siguen buscando gente, salario de 800€ brutos/mes y se valora grado de discapacidad, no hace falta experiencia.