Juegan para volver a la Ligue1. El ascenso es cuestión de tiempo ya que son líderes con margen más que suficiente. Claudio Ranieri, el entrenador, vuelve a ser el comandante de los primeros pasos de un proyecto faraónico. En 2003 fue el entrenador de Abramovich en el Chelsea, ahora lo es de Dmitry Rybolevlev en el AS Mónaco. Un mecenas que quiere plantarle cara al PSG en el fútbol francés en el corto plazo y dominar Europa en el medio y largo. Todo ello con el guiño de las ventajas fiscales del Principado.
El Mónaco asaltará este verano el mercado aunque antes debe resolver los problemas surgidos con la territorialidad. La Federación francesa exige 200 millones de euros a Rybolevlev como compensación fiscal si quiere competir sin estar afincado el club en suelo francés. Terminarán en los tribunales ya que el club del Principado lleva desde 1919 afiliado a la Federación francesa. Este es el único problema a resolver, el único cabo suelto para convencer a los jugadores y una dificultad añadida ya que en el mejor de los casos el Mónaco tendrá que tributar al 56% por sus todos los jugadores que fiche de ahora en adelante. Falcao estaría en los nuevo tipos impositivos.
El Mónaco busca un '9'. Uno de los buenos que pueda hacer de gancho para construir un gran equipo a partir de él. Falcao es el primero de la lista, la negociación pasa por el pago de los 60 millones de cláusula. El Atleti está al corriente, los dirigentes saben que Falcao, ya sea al Chelsea o al Mónaco, saldrá en verano y que el precio será lo marcado como indemnización. El salario prometido supera los 10 millones de euros netos.
Higuaín está en la lista aunque en Mónaco existe la certeza de que Falcao está a tiro. No creen que sean víctimas de una especulación. Lo único malsonante es que Radamel está para competir en la Champions. Sin ir más lejos el Atleti tiene la plaza asegurada. Un espejo en el que mirarse es Robinho. Apostó por un City primerizo y cuando por fin pudo disputar la Champions ya no era el '10'.
Otro nombre es Tévez, el Apache sería el acompañante del '9', y tras este empiezan las quinielas para el rol de jugador creador. La puesta en escena, llegue o no Falcao, son 120 millones de euros como inversión aunque los dirigentes monegascos están forzando cada negociación ya que, exceptuando el caso de Falcao, no quieren ir a máximos de gastos con los candidatos. Necesitan convencer a un primer espada para traducir en "realidad" el proyecto. Si lo consiguen sólo la Federación Francesa puede dejar en papel mojado lo que se supone que será otro club emergente con ganas de destrozar el mercado.
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