Al cierre de la octava ronda de diálogos con el Gobierno, las Farc aseguraron que están dispuestas a "revisar" cualquier "error" cometido durante los años que ha tenido lugar el conflicto armado en el país, pero descartó someterse a la justicia.
"En cuanto a la guerrilla de las Farc, de la mano del pueblo, hemos dicho que cualquier error que se hubiese cometido en desarrollo del conflicto y de la resistencia armada a que nos ha obligado el terror de las élites en el poder, estamos dispuestos a revisarlo en función de la reconciliación", dijo el grupo guerrillero en un comunicado.
"Pero ninguna autoridad moral, tienen los victimarios y sus tribunales para juzgarnos. Coloquemos en manos de la Asamblea Nacional Constituyente, del pueblo que es el soberano, las decisiones fundamentales que deben formar el tratado de paz que necesita Colombia", agregó el texto leído a periodistas en La Habana.
El diálogo entre el Gobierno y las Farc basado en el principio de "nada está acordado hasta que todo esté acordado", sigue una agenda que incluye además del tema agrario, la participación de los guerrilleros en política, la lucha contra el narcotráfico, fin del conflicto y la compensación a las víctimas.
No obstante, el grupo guerrillero se mostró optimista con el avance de la negociación pese a que no existe aún un acuerdo sobre el primer tema, clave para avanzar en el proceso.
"Se ha avanzado. Estamos avanzando. La delegación de paz de las Farc se siente satisfecha con los logros que estamos materializando, concretando en este esfuerzo por encontrar las posiciones de las dos partes", dijo a periodista el jefe del equipo negociador del grupo guerrillero, alias Iván Márquez.
"Estamos trabajando (...) por la concreción de estos acuerdos, por la construcción de un acuerdo en torno al primer punto de la agenda", agregó sin dar más detalles.