Esta es una experiencia que tuve con una doña que se llama Janet y tiene 38 años. Tiene una hija y es tía de un amigo de la universidad. Trabaja animando eventos. La conocí gracias a mi amigo, ya que me contactó con ella para que le dé clases de matemáticas y física a su hija de 15 años. Entonces, iba a su casa para dictarle las clases a su hija y todo normal. Ella vivía sola con su hija y siempre me pagaba por clase dictada la doña.

En la tercera sesión, al finalizar la clase, me dijo que no tenía dinero en efectivo para pagarme y me preguntó si podía pagarme en la siguiente sesión, que iba a ser 3 días después. Bueno, yo le dije que yo necesitaba ese dinero, porque tenía que pagar una cuota del banco. Entonces ella me dijo que me iba a pagar al dia siguiente y que vaya en la mañana a su casa para efectuar el cobro. Llegó el día siguiente y me llama justo en la mañana para decirme que si podía ir mejor en la tarde. Bueno, no me quedaba otra que aceptar. Entonces, recuerdo que me citó a las 5pm en su casa. Bueno, llegué y tal fue mi sorpresa de verla con una blusa negra escotada y un pantalón de buzo apretadito. Dentro de mí dije wow! que rica mujer! Hasta ese momento, la doña me parecia simpática y atractiva, pero nada más, pero ese dia me puse más duro que nunca. Entonces me hizo pasar a la casa y me dijo que me siente en la sala. Ella también se sentó en la sala, me entregó el dinero y me empezó a preguntar por el avance de su hija. Yo le decía que estaba yendo bien y qué necesitaba reforzar. Le pregunté por su hija y me dijo que había salido con su ex-esposo. Entonces yo le pregunté ¿ex-esposo? y de la nada surgió el tema de su divorcio. Hasta ese momento yo no sabía nada de eso y siempre pensaba que su marido no estaba porque estaba trabajando. Bueno, me comentaba que esto le había afectado mucho a su hija y que por eso no estaba bien en sus estudios. Me dijo además que su ex-esposo la había engañado hacía cerca de un año con una de sus amigas y esto también la había afectado demasiado, tanto así que en ese instante empezó a llorar un poco al recordar eso. Entonces me le acerqué y la empecé a consolar abrazándola un poco como dándole ánimo. Qué rica piel estaba tocando! En ese instante se me empezó a parar más de lo que ya estaba. Yo la seguía abrazando y me agradecía por comprenderla. En ese momento ya mis piernas rozaban con las suyas y empecé a decirle que era muy linda mientras le acariciaba el rostro, ella se dejaba y asi fue que empecé a besarla mientras mis manos iban acariciando sus piernas. Llegó un momento en que mi mano ya estaba cogiendo su concha, al principio me dijo "no por favor, mi hija puede llegar en cualquier momento" pero yo seguía haciéndoselo y le puse su mano en mi verga, y ella la fue cogiendo poco a poco y asi ella se fue excitando más. Ya excitada ella, llevó mi rostro hacia sus pechos y fui quitándole su blusa y el sostén, qué deliciosas tetas!! Me decía "quiero que me hagas el amor, hace tiempo no lo hago". Yo le dije "lo que usted pida", ella me dijo "dime Janet mejor", le dije "eres bien rica Janet" mientras me banqueteaba acariciando todo su cuerpo. Entonces ella también me fue desvistiendo y como estábamos en un sofá de su sala, la recosté en él, me puse encima de ella y empecé a besarla. Poco a poco nos fuimos desvistiendo y quedamos desnudos. Pude ver que el tatuaje que tenía en su vientre le llegaba hasta su parte más rica. Entonces llegó ese delicioso momento en el que se la metí....qué doña más caliente!!! Qué rico era estar encima de ella penetrándola hasta el fondo y tenerla montada encima de mi pinga...wow!! qué sabroso se movía!! Mientras me la follaba me decía "sigue papi, no te detengas, uyy qué rico papi!" Se notaba que hace tiempo no se la metían, porque lo disfrutaba ella también, aunque yo con un poco de adrenalina porque si llegaba su hija iba a ver que me estaba comiendo a su madre en un sofá. Uff!! Felizmente, eso nunca pasó y se la vacié con todo en su concha. Tenía ganas de volvérselo a hacer de nuevo en ese momento, porque tenía unas tetazas, unas piernas deliciosas y ese tatuaje que le llegaba a la parte más deliciosa, hasta su concha, pero su hija iba a llegar. Nunca había tenido tanta adrenalina como aquel día, pero igual fue rico tirarme a una madura en un sofá.

¿Quisieran conocer a doña Janet? Está en la más linda!!