Por: Miguel Ángel Pardo Romero, Fiscal de la ADE [1]
Para el próximo 20 de marzo la Federación Colombiana de Educadores –FECODE- y sus 33 filiales, incluida la ADE, hemos convocado una gran movilización para radicar el Pliego de Peticiones del Magisterio Colombiano ante el Gobierno Nacional, cuyos ejes centrales giran alrededor de la lucha por la dignificación de la profesión docente y por la existencia del sistema educativo estatal ante la neoliberal pretensión gubernamental de generalizar las concesiones escolares, la educación contratada y la informalidad de la educación especial, preescolar, nocturna o de jóvenes adultos.
También notificaremos a los representantes del Gobierno y del Parlamento en la Comisión Tripartita, la cual se reúne en las horas de la mañana del mismo día, que respaldaremos con nuestra permanente movilización, el anhelo de un Estatuto Docente que dignifique la profesión para todo el magisterio sobre la base de la derogatoria del Decreto 1278 de 2002, el vigente articulado del Decreto 2277 de 1979 y su actualización en correspondencia con el desarrollo de la educación, la pedagogía, los derechos laborales y políticos, tal como lo ha defendido en su propuesta la Asociación Distrital de Educadores.
Nuestro reto es grande y, como siempre, el magisterio del Distrito Capital y del país respaldará con su masiva presencia la convocatoria de la Federación. El reto del actual Comité Ejecutivo de FECODE será acertar en el contenido del Pliego de Peticiones y en el proyecto de Estatuto Docente, teniendo en cuenta los aportes de los delegados a la última Junta Nacional y, especialmente, a la XIX Asamblea General Federal que se realizó hace una semana.
En estos eventos hemos planteado que el derecho a la salud es conexo con la vida, por lo que el Pliego de Peticiones no debe centrarse en exigir el aumento de recursos por parte del Gobierno a las entidades médicas contratadas, por la vía de la denominada UPCM, sobre todo si ningún dinero les alcanza para respetar nuestro régimen especial de salud. Hay que exigirle al Gobierno Nacional que destine el 100% de sus aportes y los del magisterio a fortalecer su atención integral debido ya que en la actualidad solo invierte el 65%, utilizando el resto de los recursos para cubrir otras temas prestacionales que tienen una financiación diferente.
A la vez que debemos insistir en ponerle fin al agrupamiento por regiones para la prestación del servicio médico, que implicó, por ejemplo, que la Unión Temporal MEDICOL atienda 202.000 afiliados y sus beneficiarios en 9 departamentos y en el Distrito Capital en donde se concentra 85.000 de ellos. No queda duda que el perverso propósito es hacer sucumbir nuestro régimen especial e inducirnos a acoger el nuevo proyecto de ley que reformaría el sistema general de salud. Ahora bien, desde el punto de vista táctico, FECODE debe incorporarse con decisión a la Gran Alianza por la derogatoria de la Ley 100 de 1993 y por un nuevo modelo de salud contra la voraz intermediación de los monopolios del sector que atentan contra la vida.
Otro tema que no se había incluido en la propuesta del Comité Ejecutivo de FECODE presentada en la Asamblea General Federal, por cierto tardíamente en el evento, es nuestra justa, vigente y urgente reclamación para que se aumenten la planta de docentes, directivos docentes, orientadores, trabajadores administrativos y de servicios generales, especialmente cuando la política del gobierno nacional busca que menos maestros y maestras hagamos más, aumentando la asignación académica, las funciones y la jornada laboral.
En este contexto se explica porque la Ministra de Educación adoptó el papel de “cazafantasmas” de supuestos docentes sin niños, el cual calificaríamos de gracioso sino tuviese el malintencionado propósito de intensificar la sobrecarga laboral, ajustar regresivamente el denominado “parámetro” y las transferencias de la Nación a las entidades territoriales, ahora mas debilitadas por la reforma tributaria. Todo lo anterior, reforzado con la pretensión ministerial de aplicar su Directiva 02 de 2012.
En reclamación conjunta en el Pliego de Peticiones de los Trabajadores del Estado, el aumento salarial digno para 2013, su pronto pago y, en el caso, del Magisterio, poner nuevamente sobre la Mesa de Negociaciones la discusión que nos conduzca a un salario profesional, es un aspecto central que no debe estar ausente de nuestro petitorio a radicarle al Gobierno Nacional el próximo miércoles.
Tampoco puede faltar la exigencia de la financiación estatal y adecuada de la formación docente a nivel nacional y el derribamiento de oprobiosas trabas para que el gobierno reconozca la experiencia y los estudios para efectos del ascenso en el escalafón nacional, especialmente el que rige a los colegas del Decreto 1278 de 2002.
En materia de Proyecto de Estatuto Docente, la XIX Asamblea General Federal de FECODE, aprobó en su plenaria excluir del texto presentado por el Comité Ejecutivo de FECODE, el carácter sancionatorio de la evaluación docente, tal como lo plantearon las filiales y la ADE en su documento sobre Estatuto Docente cuyo contenido tuve el honor de sustentar nuevamente, en esta ocasión, ante la numerosa comisión que sobre el tema sesionó en el máximo órgano de dirección de la Federación. Le corresponde al Comité Ejecutivo de FECODE acertar para que la nueva versión de Proyecto de Estatuto Docente que se le presente al Gobierno, incorpore este y otros aspectos importantes consignados en la propuesta de la ADE y de otras filiales que se recogieron en la respectiva relatoría de la XIX Asamblea General de FECODE con el propósito de lograr un Estatuto Docente que dignifique la profesión para todo el Magisterio.
Ver documento de la ADE sobre Estatuto Docente
Ahora bien, en esta relación entre Pliego de Peticiones, Estatuto Docente y dignificación de la profesión docente, muchos hemos sostenido que si bien lograr un Estatuto Docente que dignifique la profesión es un asunto necesario y estratégico, también hemos planteado que en el camino de su conquista debemos desde ahora priorizar en aspectos importantes como la lucha:
Contra la sobre carga laboral,
En favor del salario profesional, la financiación estatal y adecuada de la formación docente y sus efectos en el nivel profesional y de vida;
En defensa de la estabilidad laboral amenazada por la evaluación punitiva y la paulatina desformalización del vínculo laboral del magisterio, batallando por la formalización de los trabajadores de la educación y el aumento de planta docente, de directivos docentes y trabajadores de la educación.
En defensa del régimen especial de salud y de pensiones, la extensión de este último a todo el magisterio, a la vez que conjuntamente con la población pugnemos por derogar la Ley 100 de 1993.
La Jornada Nacional del próximo miércoles se realizará de manera conjunta con la MANE, que presentará su propuesta alternativa de reforma a la educación superior. También marcharemos con el conjunto de los trabajadores convocados por la CUT y el Comando Nacional Unitario que agrupa a las tres centrales obreras y de pensionados.
Urge la lucha conjunta de toda la población frente a la agresiva ofensiva del Gobierno Nacional en materia económica, social, laboral y educativa. Nos corresponde impedir la aplicación de la reforma tributaria, esa regresiva reforma laboral que disminuye nuestro salario social en 13.5%; salirle al paso a la reforma pensional y de salud anunciadas de manera marrullera como un castigo a las pensiones “altas” tasándolas a partir de un salario mínimo, en amenaza directa del Ministro de Trabajo al magisterio y a los empleados de las capas medias; mientras que en salud, su compañero de gabinete nos quiere hacer creer que la eventual mutación de las desprestigiadas EPS en “Administradoras de Gestoras de Red” le garantizará este derecho a los colombianos.
No hay excusa para faltar a esta nueva cita por el derecho a la salud, a la educación, a la vida y al trabajo decente.


Notas:

[1] Editorial de la Asociación Distrital de Educadores –ADE- en Radio Revista Proyección, programa institucional de la ADE, domingo 17 de febrero de 2013 a cargo del profesor Miguel Ángel Pardo Romero, actual Fiscal de la ADE, Magister en Historia y Licenciado en C. Sociales.