Tras su suplencia ante el Real Madrid, el futuro del delantero en el Manchester es más incierto que nunca 
No es la primera vez que corren rumores sobre la salida de Wayne Rooney del ManUtd por diferencias con Sir Alex Ferguson. La diferencia es que ahora nadie ha levantado la voz para pedirle al delantero que no deje Old Trafford. Todo lo contrario. Periodistas, ex jugadores y aficionados mostraban ayer su apoyo al crack tras la extraña y poco explicada decisión de Ferguson de mantenerle hasta el minuto 72, ya con 1-2, en el banquillo en el encuentro de la Champions League ante el Real Madrid. Con la llegada de Robin van Persie el pasado verano se habló mucho sobre el incierto futuro de Rooney. Entonces se le vinculó al Paris SG e incluso al eterno rival, el ManCity. Sin embargo el que de niño fuera aficionado del Everton decidió continuar en el United con la esperanza de poder tomar parte en esos partidos históricos y fundamentales para el club como podía ser el que disputó el martes ante el Real Madrid.
No intentaba despistar
Antes del encuentro Ferguson indicó que a Rooney le falta rodaje tras recuperarse de una lesión de rodilla. Todo el mundo creyó que se trataba de un intento por confundir al contrario, tan típico de Ferguson. ¿Cómo iba a prescindir de Rooney en un encuentro como ese? Lo hizo y la explicación que dio su ayudante Mike Phelan tras el partido fue que el delantero no jugó porque no se ajustaba a la táctica aplicada.
Contradicciones, desilusiones, traiciones… demasiado para que Rooney siga siendo 'diablo rojo' más allá de este verano, piensan muchos, cuando además su contrato entra en sus dos últimos años de duración. En el pasado les ocurrió lo mismo a David Beckham (suplente también en la anterior visita del Real Madrid a Old Trafford en 2003) y Ruud van Nistelrooy (relegado en la final de la Copa de la Liga y en otros partidos en 2006). Y ambos abandonaron el club al acabar aquella temporada. Parece ser la manera de Ferguson de decir 'amigo, gracias, pero vete buscando otro club'.
Además, en Inglaterra aseguran que la directiva no va a permitir al técnico mantener a un jugador como Rooney que cobra unos 260.000 euros por semana antes de impuestos sin que lo utilice en partidos como ante el Madrid.
El Paris SG, al acecho
Lo más probable es que el United reduzca su precio actual, 46 millones de euros, cuando llegue el verano y escuche ofertas. De confirmarse su marcha, sería el traspaso del verano. Hace una semana el prestigioso The Times reveló que el Paris SG preparaba una ofensiva por el crack inglés.
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