Exmiembro de Fiscalía busca entablar la mayor demanda en la historia contra Colombia.
El 12 de diciembre, días después de que el Consejo de Estado enterró la famosa demanda de la familia Durango, que pretendía 600 billones de pesos como reconocimiento a su supuesta propiedad sobre 200 mil hectáreas en las que hoy crecen dos municipios antioqueños, la Nación acaba de ser llamada a conciliación por el caso Tangarife. Otoniel Tangarife Franco, quie fue miembro de la Fiscalía, asegura que por actos de corrupción la lista al Senado en la que estaba en el 2002 no resultó elegida, y que esto le produjo enormes perjuicios. Y agrega que ofició a diferentes autoridades para exigir el reconocimiento de su condición de congresista, pero que no obtuvo respuesta.
Por el llamado 'silencio administrativo', Tangarife está pidiendo una suma que no cabe en las calculadoras comunes y corrientes: 1.020 trillones de pesos. Y como evidencias entrega declaraciones juradas por él mismo ante varios despachos notariales.
Tangarife, quien también demandó a la Fiscalía en el pasado porque supuestamente fue despedido irregularmente, está jugando con fuego: el Código General del Proceso, aprobado en 2012, creó un castigo para evitar demandas millonarias. Quien busque pretensiones superiores al 50 por ciento de lo que puede probar puede ser condenado a pagar una buena tajada de lo que pretendía irregularmente.
La pretensión, con 21 ceros a la derecha y que supondría el pago de 1 millón 460 mil veces el PIB del país (700 billones de pesos), será conciliada por un procurador delegado para la Conciliación Administrativa, en presencia del Ministerio de Hacienda, el Banco de la República y la Registraduría. REDACCIÓN JUSTICIA
EL TIEMPO