 Denunciante Leyenda
 |  La función de hoy: Gobierno amplía cese de operaciones hasta medianoche para liberaciones
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 | Así lo anunció Mindefensa. Santos había calificado de "inaceptable" la no entrega de uniformados. El Gobierno Nacional decidió que durante todo el día de este viernes mantener el cese de operaciones militares en una zona entre Valle y Cauca para facilitar la entrega de los uniformados secuestrados por las Farc. El cese de las acciones militares comenzó el miércoles a las 6 de la tarde y, de acuerdo con los protocolos pactados, debía terminar este viernes a las 6 de la mañana. "Gobierno amplia suspensión de operaciones militares hasta las 12pm del viernes 15 de febrero para que liberen uniformados", se lee en la cuenta de Twitter del Ministerio de Defensa. La decisión se conoció pocas horas después de que el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) anunciara el aplazamiento de la entrega de los policías Cristian Camilo Yate y Víctor González a ese organismo y a la exsenadora Piedad Córdoba. Tras conocerse la noticia de la no entrega de los uniformados, el presidente Juan Manuel Santos calificó el hecho de "inaceptable". (Lea también: Liberación de soldado el sábado también quedó suspendida) El mandatario presidía un consejo de seguridad en Tumaco cuando se enteró de la noticia, y exigió a las Farc agilizar las liberaciones.
Ayer jueves, las Farc enviaron a un emisario hasta el sitio donde la comisión del CICR y de Colombianos por la Paz -en cabeza de Piedad Córdoba- esperaba a los policías, con la razón de que las liberaciones quedaban suspendidas por la presencia de periodistas en la zona. La información fue luego entregada por la delegada regional del organismo humanitario, Ángela Bertinni.
Santos dijo entonces: "Esto es algo inaceptable. Nadie entiende que por la presencia de algunos medios de comunicación, que no están bajo el control del Gobierno, priven o sigan privando de la libertad a estos policías".
Y agregó: "Les exijo a las Farc que los liberen pronto, ya. No hay excusas para no liberarlos. Eso de que los medios de comunicación están interviniendo no es una excusa válida para no cumplir con lo prometido".
Ocho horas perdidas La comisión humanitaria había partido ayer jueves hacia el punto indicado por las Farc a las 8 de la mañana. Viajó en cuatro vehículos en los que iban siete personas, incluyendo a Piedad Córdoba y a otros dos delegados de Colombianos por la Paz.
Hacia las 10:30 a.m. hizo una parada en la vereda Campo Alegre de Miranda (Cauca) y pidió a los periodistas esperar ahí a la delegación. Emprendió el camino hacia La Cilia, una vereda enclavada en la cordillera Central, a una hora y media de la cabecera de Miranda.
Los comunicadores siguieron a la comisión por otros caminos destapados y al llegar a La Cilia se ubicaron a 200 metros de esta. Por eso, ante el anuncio de la suspensión de la entrega por la presencia de la prensa, el reclamo reiterado de los comunicadores fue que en el punto exacto de la liberación había periodistas del canal venezolano Telesur.
Hacia las 4 de la tarde la comisión humanitaria emprendió su regresó a Cali, donde esperaba anoche un nuevo contacto con la fecha y sitio de entrega de los uniformados.
El presidente mundial del CICR, Peter Maurer, que ayer cerró una visita de cuatro días al país, lamentó la suspensión de las liberaciones y dijo esperar que se reanuden pronto. Para mañana está prevista la del soldado Josué Álvarez, secuestrado en Nariño. Eln entregaría 6 secuestrados al CICR El borrador de un protocolo que firmaron hace dos días el CICR y el Ministerio de Defensa podría ser el punto de partida para la liberación de tres colombianos y tres extranjeros secuestrados por el Eln en el sur de Bolívar.
En diálogo con 'La W', el comandante del Ejército, general Sergio Mantilla, confirmó que hay "un inicio de acuerdo del CICR y del Ministerio para que cuando esté completo el protocolo se suspendan las operaciones". Los secuestrados son los peruanos Javier Leandro Ochoa Aguilar y José Antonio Mamani Saico, los colombianos William Batista, Manuel Francisco Zabaleta y Álex López y el canadiense Jernoc Wobert. Todos, contratistas de la multinacional canadiense Geo Explorer, fueron plagiados el 18 de enero.
El acuerdo entre el CICR y el Ministerio de Defensa para un eventual cese de operaciones militares para la liberación se dio después de que el organismo humanitario verificó que Eln no había dejado en libertad a los dos peruanos y los tres colombianos, como dijo en su página de Internet.
En manos del Eln están también los alemanes Breur Uwe y Breuer Günther Otto, secuestrados en Norte de Santander hace unos tres meses. Así fue el feroz combate en Caquetá El enfrentamiento que por más de seis horas mantuvieron el miércoles una columna móvil del frente 15 de las Farc y un grupo de operaciones especiales de la Brigada XII en la inspección San Antonio de Getuchá, de Milán (Caquetá), habría dejado más víctimas en el Ejército de no ser porque un soldado logró avistar a unos 50 guerrilleros cuando se habrían camino en la selva.
El soldado narró a sus superiores que salió a buscar agua, por lo que separó del grupo. Fue cuando vio, a unos 100 metros, decenas de uniformados con cascos en la cabeza, como los que usan las tropas oficiales. Por esto, en principio dudó de que se tratara de guerrilleros.
Salió de la duda cuando vio entre los marchantes a una mujer de cabello largo, y pidió por radio la orden para abrir fuego.
En los combates que siguieron murieron el cabo Rafael Cortez Cabezas y los soldados profesionales Jaime Alberto Mejía Rodríguez, Richard Arturo Orozco Aguilar, Juan Carlos Piñeros Duarte, Víctor Hugo Ramírez Lozano, Iván Darío Ríos y Wilson Tique Guzmán.
El drama del combate aumentó por un incendio, que según fuentes oficiales se generó por los explosivos que lanzaron las Farc y por el impacto de las balas sobre el pasto seco, pues no había llovido en la zona en varios días. Algunos de los militares muertos presentan quemaduras. La llegada de aeronaves artilladas obligó luego a los guerrilleros a replegarse.
El general Germán Giraldo, comandante de la Sexta División del Ejército, de la que depende la Brigada XII, dijo que 'Fabián Ramírez', el segundo jefe del bloque Sur, había dado la orden de atacar la población de San Antonio. "Por eso destinamos un grupo especial de combatientes y los internamos en lo profundo de la selva", añadió el oficial.
Con lo que no contaba el Ejército era con que en medio del despliegue los uniformados se iban a encontrar con una columna móvil de las Farc. El bloque Sur, de hecho, ha sido uno de los menos golpeados por las Fuerzas Armadas y ha logrado mantener cierto poder militar. IVÁN NOGUERA
CORRESPONSAL DE EL TIEMPO
REDACCIONES POLÍTICA y ELTIEMPO.COM
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