11-02-2013
, 13:25:34
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#9 |
Denunciante Épico
| Respuesta: La patria tiene rabadilla y perniles Cuando se estaba negociando el TLC con Estados Unidos, uno de los capítulos que más controversia causó fue la importación desde Estados Unidos de los cuartos traseros de pollo por su precio reducido. La negociación fue muy dura en este aspecto y no tengo claro si se aplicará una salvaguardia, es decir, se restringirá su importación por un período de tiempo muestras se adapta a las nuevas condiciones del mercado la industria avícola nacional.
No es, como algunos amigos foristas parecen entenderlo, un rasgo de patrioterismo el que nos lleva a defender el pollo colombiano, sino un renglón económico que se va a ver fuertemente golpeado por el TLC, poniendo en grave riesgo 400.000 empleos.
En un TLC hay renglones de la economía que deben adaptarse, otros que definitivamente saldrán ganando y unos más que desaparecerán. ¿Podrá la industria avícola colombiana subsistir? Las proyecciones de los expertos dicen que no. Que ésta es una de las industrias que inexorablemente desaparecerán.
Un ejercicio de memoria: en la década de los sesenta del siglo pasado Colombia era autosuficiente en la producción de trigo, pero hubo una cosecha récord en Estados Unidos y con ella inundó el mercado mundial. Colombia no protegió a los cultivadores criollos y a la vuelta de poco tiempo se arruinaron. Pero la cosecha récord pasó y los precios subieron, pero Colombia ya no producía al trigo que necesitaba y hasta la fecha lo sigue importando.
Y así podríamos seguir hablando de otros productos como el algodón, pero eso es harina de otro costal. El pollo colombiano, que es la materia de este comentario, está en trance de extinción. |
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