Solo el sello Universal, al cual pertenecen Rihanna, Justin Bieber y Nicki Minaj perdió un billón de vistas en los videos musicales de los artistas que tienen contrato con ellos.

Sony fue la segunda empresa más perjudicada, al perder 850 millones de vistas en solo un
día. Las medidas fueron tomadas luego de que Youtube implementara una campaña en la que verificó qué tan reales habían sido las visitas que se daban a cada video.

Las compañías de la industria musical creen que la responsabilidad de todas esas visitas fraudulentas recae en la migración de los videos a diferentes canales dentro de Youtube. El gigante de internet dijo que simplemente implementaron una mejora en su política de conteo de vistas y que la intención no era perjudicar a nadie sino mejorar las estadísticas de la página.

Lo cierto es que la implementación de esta política de seguridad perjudicó a los artistas, pues Youtube es la principal ventana de exhibición de sus videos. En una auditoría se descubrió que existían técnicas de hackers que incrementaban sustancialmente el número de reproducciones en los conteos.

Lo peor para la industria musical es que Youtube se había convertido en un medidor no oficial del éxito que tenían los cantantes con cada uno de sus sencillos. Ahora será difícil saber si grandes videos fueron o no tan exitosos como se pensaba, mientras que todos los dedos apuntarán a la industria musical como responsables de esta falsa inflación.