Ya que aulicos y medios de comunicaciòn no dejan de entrevistarlo y comentar como lidera todas las encuestas de popularidad, no veo porque los detractores tendrìan que ser los unicos que tuvieran que abstenerse de mentarlo cada minuto como el resto de la sociedad.
Igual pasa con Chavez en Venezuela, Fidel en Cuba, Pinochet en Chile, Fujimori en Perù. Es el costo de haber sido tan "grande" para un paìs.