Ver Mensaje Individual
Antiguo 25-12-2012 , 18:29:46   #2
CANTI*
Denunciante Mega
 
Avatar de CANTI*
Me Gusta
Estadisticas
Mensajes: 5.937
Me Gusta Recibidos: 785
Me Gustas Dados: 1103
Ingreso: 14 oct 2008

Temas Nominados a TDM
Temas Nominados Temas Nominados 2
Nominated Temas Ganadores: 0
Reputacion Poder de Credibilidad: 88
Puntos: 140121
CANTI* Asesino De DiosesCANTI* Asesino De DiosesCANTI* Asesino De DiosesCANTI* Asesino De DiosesCANTI* Asesino De DiosesCANTI* Asesino De DiosesCANTI* Asesino De DiosesCANTI* Asesino De DiosesCANTI* Asesino De DiosesCANTI* Asesino De DiosesCANTI* Asesino De Dioses
  
Predeterminado Respuesta: La hija del patrón

Así fue, al quedar totalmente expuesto sin ropa ante la sensual Sandra, ella puso sus ojos sobre mi pito erecto y volvió a sonreír una vez más. Me adentré en las aguas del río al encuentro de la nena mas rica que había visto hasta entonces; y al llegar a su lado experimenté una mezcla de excelentes emociones... Nuestra piel mojada y resbalosa hacia corto circuito, y el contacto con su piel bajo el agua me parecía exquisito. Ella estaba tan cerca mío que se me antojaron sus labios y apresuradamente la besé disfrutando cada rincón de su boca... Yo sentía un éxtasis profundo al tenerla desnuda en mis brazos, jadeante, besando y mordiendo mis labios.
De pronto tomó un pequeño impulso y enredó sus piernas en mi cadera presionando mi pene, si dejar de besarla la tomé fuerte de la cintura y la sumergí conmigo en el agua; debajo de ella su piel se sentía tersa y fácil de acariciar... La punta de mi pito se sentía hirviendo y cuando se la acomode en la concha la sentí tremenda y apretada... Emergimos del agua conectados en un coito delicioso; Sandra tiraba de mi pelo y yo le succionaba las tetas esperando nunca me la pudieran quitar.
El campo cómplice de nuestro arrebato y el río partícipe de nuestra lujuria.
El liquido travieso jugaba con nuestra piel y la sensación de frescura que daba el agua a nuestros cuerpos nos hacía delirar; dentro del río era mas fácil manipular sus piernas y su trasero, pesaba menos y apretaba mas.
Aun poseído por su boca y por sus gestos, solo podía observarla a pesar de que se movía suculenta sobre mi verga... No podía creer que me estaba cogiendo a la hija del patrón. En cambio Sandra, se contoneaba frente a mí disfrutando y dejando que la viera disfrutar del momento.
Abierta de piernas, enredada en mi cintura, hacía su espalda atrás y me dejaba ver esos grandiosos senos enormes, con su respectivo pezón oscuro engrandecido, duro... Cerraba sus ojos y apretando los labios dejaba salir un gemido; luego se acercaba a mi rostro y después de besarme gemía mas fuerte cerca de mi oído... Se estaba recreando en mi pito como toda una experta.
Cuando al fin lo asimilé decidí darle todo el placer que esa hembra pudiera soportar, devorar sus tetas sería poco, quería comerla toda de un bocado.
Tan concentrada estaba de gustando mi cuerpo que cuando la desprendí de mí, ella se sorprendió y desconcertada me miró a los ojos, mientras yo poco a poco me sumergía debajo para encontrar la conchita que aguardaba en las aguas para ser hurgada y encontrar la valiosa perla.
Debajo tomé sus piernas y las puse en mis hombros, tambaleó un poco pero luego encontró de que sostenerse, hecho eso comencé a lamer su cocho regordete, mantuve la respiración y metí mi lengua caliente en su coño. Ella me halaba el pelo y rasguñaba mis orejas.
Desde el fondo lograba escuchar como se quejaba, Sandra resultaba ser una verdadera mujer, de esas que no les da miedo disfrutar.
Después de eso salí del fondo acuático y la patrona me beso cálidamente y tomó mis brazos para ponerlos en su cintura al tiempo que me daba la espalda...- dame por detrás Eduardo. Me decía de manera suplicante y pegando sus nalgas a mí dejó que aprisionara con mis manos sus senos ardientes.
La sensación del agua fría y de su cocho caliente al mismo tiempo hacían retorcerme de gusto, era tan extraño y delicioso ese sentir.
Para poseerla desde esa posición tuve que ayudarle a subir y sostenerla de su pecho para lograrla equilibrar, Sandra se derretía en gritos y yo me daba permiso de morder y chupar su espalda, todo estaba rítmicamente lujurioso cuando ella me pidió que la soltara y hundió su cuerpo hacia adelante y dentro del agua agachando su culo para dejar entrar más mi pene... Con esa movida terminé pues al doblar ella de esa forma su cuerpo me hizo gancho en el pito y la gocé más, así que empujé cada vez más rápido para terminar dentro de ese cochito delicioso que tal vez no volvería a disfrutar.
Al final Sandra se desprendió de mí y enjuagó su cuerpo una vez mas; y sin dejar de sonreír salió del río para vestirse. Nos mirábamos fijamente, y sin decir nada recogió sus cosas y se perdió entre la vereda que lleva a su casa.

CANTI* no está en línea   Responder Citando
 
Page generated in 0,05046 seconds with 11 queries