No se puede negar. La primera media hora del Atlético y el golazo de Falcao dieron para abrigar la esperanza, al menos, de un empate en el fortín catalán. Ordenado, con buen manejo del balón, de los colchoneros fueron las mejores opciones, gracias a Falcao que hasta ese momento se erigía como el mejor de la cancha. Un palazo y uno desviado auguraban el gol del Tigre que llegó en un contraataque mortal, definiendo con un toque tutil, por encima de Valdés hacia su poste derecho.

Pero el Barça es el Barça y un golazo de Adriano cuatro minutos después, al mejor estilo de Falcao, con una curva mortal hacia el palo derecho de Courtois pusieron las cosas en su sitio. De ahí en adelante, aunque los colchoneros trataron de volver por sus fueros, Busquets, en un entrevero en el área, lanzó un riflazo que ponía en ventaja al mejor equipo de la Liga.

En el segundo tiempo los colchoneros se fueron a menos, máxime con la lesión de Felipe Luis que dejó un boquete abierto por su banda, al no tener reemplazo en el banco (tarea para un próximo fichaje) y pese a no haber sido uno de los mejores partidos de Messi, bastó un chispazo para subir el marcador y evitarse sorpresas. Un 3-1 y el desgaste físico del Atlético le dejaron el campo libre a los catalanes para acorralarlos en su campo.

Pero faltaba el cuarto, un grosero descuido de Godíni que en vez de despejar el balón se inventó un taco para pasársela a Miranda, teniendo a Messi pegado a él. El resultado no se hizo esperar. Messi robó el balón y tranquilamente puso la lápida al partido, llegando a 25 goles en la temporada.

Nada que hacer, la Liga tiene dueño. El Barça no sólo pone nueve puntos de por medio al Atlético, sino trece al Madrid que en un impensable resultado empató con el Espaynol en su propio campo.

Cita:

El Barcelona dio el definitivo golpe a la Liga tras doblegar 4-1 al Atlético, que se queda a nueve puntos del liderato. Falcao adelantó a los rojiblancos pero muy poco le duró la alegría porque Adriano empató poco después con un golazo por toda la escuadra. Busquets adelantó al Barcelona justo antes del descanso y Messi se encargó de redondear la goleada.

Fuente; Marca