El Madrid sigue haciendo la tarea. No de la mejor manera, no como un real aspirante al título, pero persiste aferrado a las genialidades de sus jugadores. Tiene a su favor el milagro cotidiano, el que les da esperanzas, aunque en el fondo saben que esta temporada no es la suya, no porque sean inferiores al Barça, sino porque fueron inferiores a sí mismos, y cuando uno está en la cumbre eso no se perdona.

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LOS DE MOURINHO REMONTAN ANTE UN GRAN VALLADOLID GRACIAS AL ALEMÁN Özil descongela al Madrid El Real Madrid logró una sufrida victoria en Pucela (2-3) · Mesut Özil hizo dos dianas, el segundo un golazo de falta · El Real Valladolid plantó cara hasta el último suspiro ante un Madrid que volvió a generar dudas con su juego · Manucho hizo los dos goles de los locales JAVIER ESTEPA 08/12/12 - 21:53. Por fin volvió a ser decisivo. Cuando el Real Madrid más necesitaba a un futbolista que tirara de genialidad para desbloquear una situación comprometida, apareció la figura de Mesut Özil para brillar en una fría noche en Valladolid. El equipo de José Mourinho estaba obligado, una jornada más, a ganar para intentar meter presión a Barça y Atlético de Madrid... y los locales estuvieron a punto de dar un susto a los madridistas. El partido comenzó de la peor manera posible para el Real Madrid. Un saque de esquina en el minuto 6 supuso el primer gol de Manucho. Desajuste defensivo del conjunto blanco y el delantero vallisoletano, solo en el área pequeña, remata un balón perdido para dejar al Madrid más que helado. La alegría duraría muy poquito para el equipo de Miroslav Djukic, que vio cómo Benzema empataba el choque tras un resbalón inesperado de Marc Valiente. Lejos de bajar los brazos, el Real Valladolid continuó siendo fiel a su estilo y un nuevo córner acabó sonrojando al Real Madrid. Otra vez Manucho remataba, esta vez de cabeza, para batir a Iker Casillas. José Mourinho no se podía creer cómo su equipo era capaz de tropezar en la misma piedra. Sociedad franco-alemana Fue entonces cuando apareció la figura de Mesut Özil. Cuando el descanso llamaba a la puerta el alemán se asoció con Karim Benzema para fabricarse ellos mismos el empate. Özil metió un pase raso dentro del área que lo interceptó Benzema para que, con un taconazo de ensueño, dejara solo ante el portero al germano. El '10' madridista no perdonó ante Dani Hernández. 2-2 y todo por decidir en la segunda mitad. Mou decidió mover banquillo y durante los segundos 45 minutos realizó varios cambios en su defensa. De primeras quitó al canterano Nacho para dar entrada a Di María. Después, el sustituido era Arbeloa para que Modric pisara el césped del Nuevo Zorrilla. El Madrid arriesgo para ganar un partido que se estaba poniendo muy feo. Así, una falta en la frontal del área no la tiró Cristiano, sino Mesut Özil. El internacional germano volvió a tirar de efectividad y con un disparo directo a la escuadra de Dani Hernández puso el definitivo 2-3. Özil celebró como nunca lo había hecho ese golazo de falta. José Mourinho volvió a recomponer una defensa que contaba con Xabi Alonso de central y a Callejón de lateral izquierdo. El tolosarra volvió a adelantar su posición para que Varane, que entró por Benzema, ocupara el lateral derecho y dejar a Pepe y Ramos de centrales. El Real Valladolid apuró sus opciones y buscó hasta el último suspiro un gol que le diera un punto. No fue así. El Real Madrid volvió a generar dudas sobre su juego pero sigue haciendo los deberes.

Fuente: Marca