Nada qué hacer. El Barça, con el mejor arranque liguero de la historia sigue su marcha triunfal , gustando, goleando y arrasando. Esta vez un Athletic que tiene la pólvora mojada desde que perdiera la Europa League con el Atlético, sólo ofreció resistencia en los primeros minutos. Luego, el recital le correspondió a los culés hasta completar una goleada y números que hacen trizas los récords.

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CONSIGUE EL MEJOR ARRANQUE EN LA HISTORIA DE LA LIGA El Barça reescribe el inicio de la historia Piqué, Amorebieta en propia puerta, Adriano, Cesc y Messi fueron los goleadores culés Ibai marcó el tanto del honor del Athletic PABLO EGEA 01/12/12 - 22:02. El Barcelona pulverizó un nuevo récord y tras su goleada (5-1) ante el Athletic de Bilbao, consiguió el mejor arranque liguero de un equipo en la historia de la Liga. Más allá de números, el conjunto de Tito volvió a escribir una página en la historia con letra dorada, como gusta a los amantes del balón y con muestras del mejor fútbol que se puede recordar en 'Can Barça'. Sólo durante 20 minutos tuvieron rivales los locales. Los de Bielsa saltaron al césped con descaro e ilusión por poder meter mano a un equipo que terminó haciendo lo que quiso sobre el campo y mostró que su único techo puede ser el cielo. Una vez superada la presión de los visitantes en el campo culé y conforme el orden de la zaga rojiblanca iba desapareciendo, los azulgrana comenzaron a mover el balón como sólo ellos saben, con la velocidad y precisión que permite superar cualquier barrera que se instale sobre el verde. Xavi movió a los suyos, Pedro hizo un trabajo impagable por la banda, Messi siempre estaba en el lugar oportuno, Iniesta creaba huecos con sus maravillosos regates y Cesc, más atrasado que en otras ocasiones, llegaba de segunda línea para finiquitar a los leones. De esta forma, el primer tanto llegó en una de las pocas jugadas que no son precisamente el punto fuerte de los catalanes. Tras un saque de esquina en largo, Piqué pudo aprovechar un balón suelto y lo mandó al fondo de la red sin oposición. Sólo dos minutos después, Xavi pulió su bota con un pase en largo sobre el desmarque de Messi, el argentino se quedó solo ante Gorka y tras picar el cuero ante el meta navarro, vio como Amorebieta se marcaba en propia portería en su intento por despejar. El choque estaba visto para sentencia, pero ni mucho menos había terminado, el espectáculo de los culés acababa de empezar y sus aficionados disfrutaron como en las mejores noches de la era Guardiola. El gol de Adriano, para enseñarlo en las escuelas Antes del paso por el túnel de vestuarios, Adriano, que suma cuatro tantos en la presente campaña, culminó una jugada que debería ponerse en todas las escuelas de fútbol. Messi, Cesc y el brasileño se crearon sus propios espacios por la izquierda primero, cambiaron la orientación de la jugada en el centro ante la sorpresa de la zaga del Athletic después y el lateral vio como su incorporación al ataque por la derecha tuvo su premio. La segunda mitad tuvo el mismo argumento, se jugó en el campo visitante casi por completo y Gorka sólo pudo salvar una mayor goleada. De inicio, Iniesta habilitó a Cesc con un perfecto pase con el exterior desde la frontal del área. El manchego vio a su compañero lo justo para atraer primero a toda la defensa rival y para dar una perfecta asistencia de gol que no perdonó el de Arenys de Mar. La posesión y el continuo movimiento daban sus frutos ante la meta rojiblanca. Sólo con el Barcelona confiado y con la inercia del trabajo realizado hasta entonces, pudo el Athletic marcar el gol del honor. Iturraspe puso un balón en profundidad sobre el desmarque de Ibai, Adriano no siguió a su marca y el extremo del Athletic se plantó solo ante Valdés para acortar distancias. Era el tercer disparo de los leones sobre la portería rival. Finalmente, Pedro, uno de los más destacados sobre el verde, todavía tuvo tiempo para demostrar que además de entrega, voluntada y trabajo, tiene calidad para ser uno de los pesos pesados del ataque culé. El canario jugó por la izquierda con Jordi Alba y por fortuna para él, el lateral no llegó a controlar un balón que le cayó a Messi. La Pulga controló, vio y venció a Gorka con un disparo al único sitio donde nadie podía llegar. Una exhibición más que terminó con fiesta en el Camp Nou y con el Barcelona dando muestras de que poco, o nada, puede pararle este año en su lucha por la Liga.

Fuente: Marca