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Denunciante Ultra
 |  Nissan Juke-R: único en su especie
Calificación: de
5,00
 |  Lo primero que llama la atención del Nissan Juke-R es su estética. El color negro mate, los spolilers de la zaga, las llantas de 20 pulgadas… Todo en este pequeño SUV recuerda a cierta artesanía sobre ruedas. Una artesanía, no obstante, que tiene un precio desorbitado. Nada menos que 500.000 euros cuesta este prototipo. Pero, ¿por qué cuesta tanto?. Pues que se trata de una obra de ingeniería. Un desarrollo realizado por la empresa de competición RML Automotive en colaboración con Nissan Motor Europa, que ha consistido básicamente en cambiar completamente el coche. Entre otras cosas porque se ha insertado el grupo motriz del Nissan GT-R en un Nissan Juke.  Una tarea muy difícil ya que la mayoría de las piezas del GT-R no cabían en el Juke. De hecho, se ha tenido que retrasar el salpicadero, la consola, el cuadro de instrumentos y los pedales. Asimismo, se ha movido la posición de conducción y el centro de gravedad y se ha incluido la jaula de seguridad aprobada por la FIA (Federación Internacional de Automovilismo). Todas estas modificaciones se traducen en una gran cantidad de horas de los ingenieros de RML. Unas horas, además, que se han cobrado a precio de oro a Nissan. De ahí que la firma japonesa haya decidido comercializar como máximo un total de 23 unidades del Juke-R.  Hasta la fecha, de esas 23 unidades del Juke-R, Nissan asegura que ha vendido tres, dos de ellas a un mismo cliente. «Se trataba de un cliente de Oriente Medio. Previamente vio que otro cliente compraba un Juke-R y dijo: yo quiero dos, uno en blanco y otro en negro», afirman de Nissan. Otra de las particularidades de este modelo es su motor. En concreto, se trata del propulsor de la primera versión del GT-R. Hablamos de una mecánica de seis cilindros en V, 3,8 litros de cilindrada y una potencia máxima de 485 CV. Un motor que recientemente se ha actualizado y ofrece ahora 550 CV.  Lo más difícil a la hora de acceder al vehículo es sortear la jaula de seguridad. Hay que levantar mucho la pierna y realizar un pequeño escorzo para meterse dentro del habitáculo. Una vez dentro, también sorprenden los asientos de tipo bacquet –firmados por OMP- y el cinturón de seguridad con un arnés de cinco puntos de anclaje. No obstante, encontrar una postura de conducción cómoda es bastante fácil. ¡Y eso que tiene unos reglajes bastante limitados!.  Ya en marcha, sorprende que el Juke-R empuje desde muy bajas vueltas. Prácticamente desde las 1.000 revoluciones, algo insólito para un deportivo de circuitos.  Además, el motor es muy progresivo y en cuestión de décimas de segundo alcanza las 6.500 revoluciones. A ello se suman unos frenos con un increíble mordiente, algo que se aprecia pese a que la calzada esté completamente mojada. Otro aspecto que sorprende en el Juke-R es la nobleza del vehículo. Una nobleza que se traducía en mínimas pérdidas de tracción, incluso con el suelo resbaladizo. Algo que tiene su explicación en la tracción total. Sólo acelerando con contundencia, es cuando se aprecia una pequeña pérdida de tracción en el eje trasero. 
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