APÓN.- Un hombre oriundo de la localidad de Fukuoka, de 57 años, se ha llevado una gran sorpresa al percatarse de que tenía una intrusa viviendo dentro de uno de sus armarios.
El sujeto, soltero, comenzó a notar que en su casa pasaban cosas extrañas como la desaparición de la comida. Intrigado, instaló una cámara de seguridad descubriendo a una mujer paseándose tranquilamente por el domicilio cuando se encontraba a solas.
La policía entró entonces en acción descubriendo a la mujer instalada en la parte superior de un armario de gran tamaño, donde estuvo viviendo al parecer “por casi un año pero no todo el tiempo”.
La mujer, llamada Tatsuko Horikawa, tiene 58 años y había colocado una colchoneta y varias botellas de agua en la parte superior del armario donde cabía una persona acostada.
Las autoridades japonesas sospechan que puede haber escondites similares en otras viviendas de la zona.
EL INTRANSIGENTE