Lo curioso de las palabras del expresidente Uribe es que critica al presidente Santos de negociar con terroristas, narcotraficantes y asesinos, y olvida que los paramilitares con los que él negoció eran terroristas, narcotraficantes y asesinos.

Si éstos son sus argumentos, ¿cuál es la diferencia entre un proceso de paz con la guerrilla y otro con paramilitares? ¿Por qué si se pudo hacer con la extrema derecha armada, autor de múltiples matanzas, y no con la guerrilla, que igual ha cometido crímenes deleznables?

Y la pregunta mayor, ¿por qué su gobierno trató de iniciar conversaciones de paz con la guerrilla? Y no lo confirman sus enemigos, sino un uribista de pura cepa, uno de sus defensores acérrimos de su obra de gobierno, el senador Juan Lozano.

Es el problema de anteponer los odios personales a los intereses del pueblo colombiano. Es cierto que las Farc mataron a su padre, pero su deseo de venganza no puede llevarse por delante la necesidad que tiene Colombia de la paz.

"El Gobierno está alimentando el conflicto": Uribe


Tadeo Martínez/Semana Álvaro Uribe en Barranquilla.

El expresidente Álvaro Uribe Vélez esperó a que el presidente, Juan Manuel Santos, confirmara los diálogos que delegados del Gobierno Nacional sostienen con voceros de la FARC, para hacer su intervención en el Centro Comercial Gran Boluevard al norte de Barranquilla y así rechazar de plano la negociación con la guerrilla a quienes calificó de "terroristas" y "narcotraficantes" que están solicitados en extradición por el Gobierno de Estados Unidos.

La presencia del expresidente estaba prevista a las seis de la tarde, pero ingresó al salón donde lo esperaba un nutrido grupo de empresarios pasadas las siete de la noche. Uribe Vélez hizo anoche el lanzamiento de su movimiento Puro Centro Democrático con la afirmación de que iba a dar la batalla y que esa negociación no sería fácil.

"Cómo va a explicar este Gobierno una negociación con unos terroristas que han asesinado a los colombianos, cómo va a negociar la paz con los más grandes violadores de los derechos humanos de los colombianos, cómo va a negociar la paz con unos narcotraficantes, se preguntó el expresidente al tiempo que descalificó al Gobierno con la afirmación que se había apartado de la plataforma que lo eligió", dijo Uribe.

A lo largo de su intervención reprochó Uribe varias de las actuaciones del Gobierno del presidente Santos y aseguró que lo único que le importaba era el lucimiento internacional, pero no le importaba que los terroristas son reclutadores de menores, asesinos y han regresado a la extorsión.

Expresó su rechazo a la posibilidad de que unos generales participaran en una negociación. "Si los oficiales y soldados ven a unos generales sentados negociando con los jefes guerrilleros, dirán: para que pelear si nuestros comandantes están negociando la paz".

Agregó Uribe: "aunque ya todos sabíamos y dijimos desde hace una semana lo que el Gobierno acaba de anunciar, yo esperaba que no fuera cierto, esperaba que el gobierno me rectificara, pero las denuncias se confirmaron".

El expresidente expuso sus argumentos desde diversos puntos de vista y arremetió contra el anuncio del presidente preguntándose: "¿Queridos compatriotas, qué es lo que se va a negociar con los terroristas: el desarrollo rural, la política tributaria, los derechos humanos? ¿Qué es lo que va el país a negociar con unos bandidos que se enriquecieron con el dinero del narcotráfico? No amigos, este es un país democrático que no puede negociar su agenda con los terroristas", remató con la afirmación de que va a dar la batalla.

Precisamente, antes de su intervención se hicieron cábalas de cómo se conformaría una lista al Senado encabezada por el expresidente Uribe, pues en horas de la mañana en una intervención en una universidad allegados a Uribe debatieron esta idea.

También dijo que esta negociación puede servirle como factor de reelección al presidente venezolano Hugo Chávez y al mismo tiempo debilita la seguridad democrática. "En estos dos años, agregó, se ha debilitado la seguridad, pero el Gobierno no lo reconoce y dice que todo está a las mil maravillas. Dicen que aquí no hay problemas, que es el Twitter de Uribe".

"Cuál es el momento indicado para una negociación", se preguntó el expresidente, a lo cual respondió que con una política triunfante y un gobierno fuerte. "No puede haber un proceso de negociación si no suspenden sus actividades criminales".

Lo que más lamentó es que se inicie un diálogo y no se hable con el pueblo. "Me duele mucho esa doble moral y me pregunto: ¿Qué dirán aquellos que dicen que hay que negociar todo con las FARC, pero cuestionan que el gobierno que lo ayudó a elegir negociara la desmovilización de los paramilitares, quienes tendrán que pagar una condena".

El expresidente manifestó su preocupación por el mensaje que envía el Gobierno al exterior al darle estatus de legítima a la guerra de las FARC.

"Nosotros entregamos al presidente Santos un país optimista, con una guerrilla prácticamente derrotada, nos despertábamos y decíamos el país está prosperando, pero desde hace varias semanas amanecemos enredados con este tema de la guerrilla, otra vez volvemos a desayunar con la misma noticia de hace diez años".

Para Uribe se quiere dejar de lado las posibilidades de inversión por el capricho publicitario de la paz. "Hoy en todos los gobiernos y grandes inversionistas estarán pensando en que es mejor esperar a ver qué pasa antes de invertir en Colombia, mientras no termina la negociación con la guerrilla".

Fuente: Semana