Terminó el sufrimiento para San Lorenzo. La pelea que comenzó a mediados del año pasado fue triunfo para el equipo de Boedo. Uno de los cinco equipos más importantes que tiene el fútbol argentino se aseguró su permanencia en la máxima categoría.
¿Cómo? Poco importa el juego, sí los resultados. Y aquí, el "Ciclón" fue mejor que un tibio, muy tibio, Instituto. La serie se comenzó a definir el pasado jueves en Córdoba con el triunfo 2-0.
En el Nuevo Gasómetro sólo había que ponerle un moño. Y se hizo. El empate 1-1 es anecdótico. ¿Lo importante? San Lorenzo mantuvo su lugar en la máxima categoría.Ya no importa decir que este empate fue justo y entre dos equipos que se vieron sometidos a los nervios que la situación requería. Que nunca se vio un juego fluído. El "Ciclón" desde un primer momento dejó en claro su idea: replegarse, apostar al contragolpe, cederle la pelota al rival y esperar que los minutos pasen.¿Instituto?
Nada, de nada, de nada. En esta serie de Promoción (al igual que la parte final en la 'B') se mostró como un equipo débil, frágil, sin ideas, carente de personalidad y con un técnico que desde afuera le imprime a sus jugadores más nervios que soluciones.Pero... ¡Qué le puede importar esto a San Lorenzo! Sus hinchas están eufóricos, tranquilos. No importa que dentro de sólo un mes, la pelea vuelva a ser la misma: mantener la categoría.Ahora, es tiempo de disfrutar, de relajarse, de sacarse de encima toda la presión que vivieron en este año. Ya habrá otra etapa para pensar en lo que viene.San Lorenzo fue, en estos dos partidos, mucho más que Instituto. Y así, se quedó con la Promoción. Y así, mantuvo su lugar en Primera División.
Fuente: Infobae