 Respuesta: Violadores piden igualdad
Hay derechos fundamentales que están por encima de los demás como el derecho a la vida y por ello, en la mayoría de legislaciones, se le castiga con penas muy rigurosas, incluida la capital. Sin embargo, también hay una especie de derechos esenciales que tienen preeminencia en su protección sobre los demás y son los que tienen que ver con los menores de edad.
No sólo por la propia indefensión que se deriva de la edad y su incipiente desarrollo emocional y social, causándoles secuelas que los afectarán durante toda su vida, sino porque cualquier daño que se les haga afecta a la sociedad misma en su conjunto ya que estos menores son la generación que determinará el desarrollo futuro de la humanidad.
De ahí la gravedad con la que se castigan este tipo de delitos que no son comparables con los demás, excepto con los que atenten contra la vida. En éste se le quita un don preciado a un individuo, en el otro, se afecta a los individuos que luego tomarán el mando de la sociedad. En vez de aligerarle las cargas a los violadores, hay que endurecérselas a los homicidas.
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