Simon Wolfson (foto), directivo de la empresa de moda británica
Next, premiará con ese dinero a la persona que presente una opción creativa de
cómo un país puede salir de la eurozona. Ya hay cinco finalistas
¿Se puede poner un precio a una
posible solución de la crisis de la eurozona? Para el británico
Simon Wolfson, al frente de la empresa de retail Next, no sólo es posible, sino que ya determinó su valor.
El empresario premiará con
250.000 libras (US$ 325.000) a quien presente un
"escenario elegante" en el que uno o varios países puedan dejar la zona del euro. Hasta el momento, el
empresario recibió 425 propuestas y ya se seleccionaron cinco finalistas, según un artículo publicado por el diario
The New York Times. El ganador será anunciado el 5 de julio.
Los ensayos finalistas prefieren
escapar de la cuestión política y se concentran en cuestiones como la mejora de competitividad en
Grecia, Portugal y España, a través de recortes de gastos en lugar de devaluar la moneda. Al estar ligados al euro, en la actualidad no pueden elegir esa opción.
Entre los jueces se encuentra el economista
Charles Goodhart y
Derek Scott, ex asesor del primer ministro Tony Blair. Dentro de las 425 propuestas recibidas sorprendió la de un
holandés de 11 años, que explica a través de un diagrama cómo los griegos podrían cambiar sus euros por dracmas.
Si bien no presentan ideas que antes no se hayan abordado, sacan a la luz las complejas cuestiones jurídicas y dificultades que podría generar la
vuelta del dracma en Grecia. Entre los finalistas, se encuentran:
• Roger Bootle y su equipo de la consultora Capital Economics, con sede en Londres, consideran que una ruptura de la zona euro dejará
un núcleo de países que giran en torno a Alemania y, por otro lado, una serie de naciones más débiles. A su vez, existirán menos relaciones comerciales que unan a esos dos grupos de países.
• Jonathan Tepper, de la consultora de investigación Variant Perception,argumenta que la historia está repleta de
uniones monetarias que se quebraron. Si bien en el corto plazo es una decisión ardua,se puede superar en el largo.
Tepper toma como ejemplo la
desintegración de Checoslovaquia y la ruptura de la Unión Soviética. • Neil Record, ex economista del
Banco de Inglaterra y fundador de Record Currency Management, dice que si sólo un país abandona el euro, todo el proyecto se torna "insostenible".
• Catherine Dobbs, ex analista de Gartmore, propone crear un "nuevo euro" para los países más débiles, que se puede depreciar más rápida, y un euro más fuerte para naciones como Alemania, Austria y Holanda.