Aunque saben que Van Persie lleva tiempo dando largas con su renovación, en el Arsenal no están dispuestos a regalar a su jugador franquicia. Ni mucho menos. De momento, la postura oficial del club gunner se resume en tres palabras: no se vende.
Wenger sabe que, tras la marcha de Cesc, Van Persie se ha convertido en el jugador más importante del Arsenal, por no hablar de la faceta goleadora en la que se ha destapado esta temporada. Sus 22 dianas le convierten no sólo en el máximo goleador de la Premier, sino también en un candidato claro a disputarles la Bota de Oro a Cristiano Ronaldo y Messi.
Por ello, el Arsenal sabe que el valor de mercado de Van Persie está en torno a los 40 millones. De momento, el club londinense no está dispuesto a sentarse a negociar con ningún equipo que no esté dispuesto a poner sobre la mesa esa cantidad. El holandés acaba contrato en 2013 y es consciente de que si se niega a renovar, el Arsenal no va a tener más remedio que ponerlo en el mercado. El jugador, de 28 años, sabe que está ante su última oportunidad para firmar un gran contrato... y para irse a un grande de Europa donde pueda disputar títulos, algo que es más que complicado en el Arsenal.