Nos guste o no, la actualidad tecnológica está sembrada estos días de las consecuencias que han seguido el cierre de Megaupload, un suceso que posiblemente será recordado como un antes y un después para Internet con el paso de los años. Como movimiento perfectamente lógico, otros servicios de descarga directa se han ido blindando ante la amenaza legal de diversas formas.

Los últimos en mover ficha han sido los responsables de Mediafire, para mi gusto el mejor servicio de esta categoría. En su caso han decidido no limitar ninguna de sus estupendas posibilidades, pero sí impedir que Google indexe su contenido, de forma que éste dejará de aparecer en los resultados de búsqueda.

Mediante el uso del valor “noindex”, que ya está incluido en todas sus páginas, Mediafire bloqueará los rastrearores de contenido de Google, por lo que en el plazo de unas semanas habrá desaparecido por completo. Rapidshare también realizó un bloqueo similar con su último cambio de diseño, con el objetivo de intentar mantener un perfil más discreto y mantenerse bajo el radar de quienes persiguen a esta clase de servicios. ¿Será suficiente?