El otro día
Apple retiró de
App Store la aplicación
WhatsApp y sus desarrolladores anunciaron que habían mandado una nueva revisión a los de Cupertino y esperaban su aprobación. Las motivaciones de esta retirada no han sido desveladas, pero todo apunta a fallos de seguridad.
Sergio de los Santos, coordinador de Antifraude de
Hispasec, afirma en un artículo
publicado por la Cadena SER en el que se explica la pobre seguridad que rodea al servicio, desde su básico sistema de autenticación vía número de teléfono -posibles robos de identidad- hasta la falta de privacidad al enviar los contenidos sin cifrado alguno desde y hasta los servidores
WhatsApp.
Tal y como
comenta De los Santos:
“En el caso de una carta, cuando yo la envío tiene que leerla sólo el destinatario, pero con WhatsApp, mínimo el cartero lo va a ver. Es como enviar secretos con postales“.
Así pues, queda en entredicho la seguridad de la aplicación de
mensajería push más popular del momento. Los desarrolladores de la misma
ni siquiera apostaron por cifrado
SSL para el envío y recepción de mensajes y eso hace que cualquier usuario vía un
sniffer pueda leer los mensajes que se envían a través de
WhatsApp.