Hace varias semanas que el rumor sobre una posible boda entre
el futbolista y su novia, la modelo Irina Shayk, se instaló con fuerza en la prensa internacional Cristiano Ronaldo y su amada acapararon la atención de las cámaras en el Palacio de los Deportes de Madrid, donde
disfrutaron del clásico de los clásicos en la liga española de básquet: Real Madrid-Barcelona.
Además de animar a su equipo, la pareja intercambió besos furtivos y guiños de complicidad:
una ocasión más para la larga lista de apariciones públicas de las últimas semanas.
Cristiano e Irinano ocultan su amor ante los medios y, aunque no hablan de futuro,
sí demuestran que lo suyo va muy en serio.
Fuentes de su entorno explicaron a la revista
Semana que podrían
estar preparando para este mismo año el paso definitivo: una boda en Madeira, la tierra natal del futbolista.
La ceremonia se celebraría después de la Eurocopa de Fútbol de Polonia y Ucrania.
Ellos, por su parte, ni confirman ni desmienten, pero lo que no ocultan en ningún momento es que, después de dos años y medio juntos,
su relación está cada vez más consolidada.