Ver Mensaje Individual
Antiguo , 11:17:17   #1
Shocked Medios de programación masiva: propaganda y control mental Calificación: de 5,00

Los mejores licores






Una breve historia de cómo opera el mass media --ligado al poder político y financiero-- en la psique humana, propagando un estilo de vida (aspiracional, consumista, alienante) indispensable para mantener la estratificación actual de la sociedad.





”The biocontrol apparatus is prototype of one-way telepathic control. The subject could be rendered susceptible to the transmitter by drugs or other processing without installing any apparatus. Ultimately the Senders will use telepathic transmitting exclusively”. William Burroughs, Naked Lunch.
La humanidad despertó al poder de los medios masivos de comunicación con la Alemania nazi, cuando Hitler y Goebbels recrearon y explotaron la conciencia tribal a través de la radio –revelando que los programas de medios podrían programar a las masas. Todos sabemos lo que sucedió con la propaganda de ese lado del Atlántico. Así lo que estaba sucediendo en Estados Unidos, en comparación con el manejo mediático de la máquina nacionalsocialista, podría parecer algo menor: sólo se estaba fraguando el star-system, la cultura aspiracional, el american-dream, el corporativismo. Sin embargo, los efectos de la máquina mediática estadounidense –la más engranada- tal vez no sean menos devastadores, si consideramos su papel fundamental en establecer las condiciones que legitimaron la explotación de los recursos naturales del planeta y la expansión, glamorizada, de la ideología de “la libertad” y de la “democracia”, que en la práctica se traducen en la expansion del consumo y del capitalismo plutocrático. Además, los medios estadounidenses crearon un modelo del uso y control de medios que fue replicado en todo el mundo. Tal que, aunque quizás podrían haber sido otra cosa, los medios de comunicación se convirtieron fundamentalmente en sofisticados brazos politicos para mantener el status quo –administrando dosis radiantes del opio detectado en la religión antes por Marx—y proteger el poder de la élite que se beneficia del orden mundial desde la cima de la pirámide electrónica.
El actual orden mundial no podría haber sido construido sin la participación de los medios masivos de comunicación como mecanismos de difusión y propaganda de una forma de vida y un sistema económico. Más allá de las fronteras, los medios de comunicación transmiten un paradigma global de programación memética que se convierte en un habitat. El peligro de esta transmisión de “medios-ambientes”, usando la terminología de Marshall Mcluhan, es que los paisajes que reproducen –más que el paraíso exótico de la diversidad–son los sets uniformes de una misma ideología que se camuflea en el estupor del espectáculo.




El “troyano” que emiten los medios masivos es que son promotores de la diversidad y que, dentro de la sociedad de consumo que embandera la alternativa de productos, ofrecen un amplio espectro de programas y contenidos que enaltecen la diferencia, un crisol de multiculturalidad polifónica. Hacen llegar, nos dicen, lo local al ámbito global, el pulso del planeta en su microcosmos se sirve en tu pantalla; son albaceas de la aldea y eléctricamente nos informan de lo distante, nos hacen televidentes de lo íntimo, fraguando una fraternidad trasnacional a través de la imagen. Pero quien haya zappeado por los canales de un televisor o escaneado las diarios nacionales se habrá dado cuenta que no sólo recircula la misma información, lo hace bajo la misma agenda.
Los medios masivos de comunicación ejercen una batalla simulada por la audiencia, fingiendo una competencia acérrima que no hace concesiones, argumentando diferencias ideológicas irreconciliables. Pero este combate en el ring mediático por la atención (y la programación) del espectador es una gran ilusión. Las grandes compañías mediáticas que en prácticamente todos los países del mundo ejercen un sistema oligopólico rara vez son enemigos –sirven a un único y absoluto interés: el capital (y la perpetuación del mismo). (Todo el show, toda la manipulación, todo el falso maniqueismo politico mediático es solamente el montaje que permite mantener las condiciones sociales en las cuales el paradigma de consumo se reproduce aumentando el flujo del capital hacias las arcas en la cima de la pirámide electrónica)
Pese a algunos inventores con sueños megalomaniacos de iluminar a la humanidad, como Nikola Tesla, la tecnología siempre ha sido controlada estratégicamente por el Estado o los poderes financieros supraestatales. El cine, por ejemplo, que tiene una raíz en el arte y en el uso documental educativo, rápidamente es canalizado y convertido en industria. Haciendo de este “arte total”, una “ fábrica de sueños” y de Holly-wood un tecnobosque druida de encantamiento e ilusionismo –una máquina de vapor de imágenes– que propulsaría el “american dream”, el modelo de vida por todos deseado que viene con una serie de aditamentos necesarios para su consecución. Así veremos que las grandes casas productoras formaran alianzas subrepticias con las tabacaleras o con las refresqueras, por citar los ejemplos más conspicuos, para promover sus productos a través de una serie de actitudes (y recibirán el apoyo de la industria militar en sus filmaciones a cambio de implantar en la psique de las masas un gen cultural: lo malos son los comunistas, los terroristas, Estados Unidos debe salvar al mundo, ergo, es necesario invadir a ese país, etcétera). Lo que revela es que el product placement no es algo nuevo, el cine hollywoodense y la televisión son gigantescas estructuras de product placement, pero el metaproducto que colocan, al colocar tantos otros productos, es la vida como un producto de consumo (el medio es el mensaje en un loop de circuito cerrado).


La sofisticación de la propaganda

Cuando la capacidad de producción industrial llega a un punto en el que supera las necesidades básicas de la población, se enfrenta con el problema de cómo hacer que las personas compren y consuman un excedente de productos que no necesitan. Este es el eje que dinamiza el crecimiento económico, y para un consumo masivo se necesita una comunicación masiva. Este es el origen –en una version simplificada– de la publicidad, sinónimo la mayoría de las veces de propaganda.






Comentarios Facebook

__________________
The Shevi return....
WeBMaSTeR_ShEvI no está en línea   Responder Citando

compartir
                 
remocion sep Gold sep Silver sep Donar

marcaNo Calculado   #1.5
SponSor

avatar
 
Me Gusta denunciando
Estadisticas
Mensajes: 898.814
Me Gusta Recibidos: 75415
Me Gustado Dados: 62988
Fecha de Ingreso: 02 jun 2006
Reputacion
Puntos: 1574370
Ayudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen caminoAyudante de Santa está en el buen camino
emoticon Re: Medios de programación masiva: propaganda y control mental

 
Los mejores licores
 
   
   
_______________________________________________
Publicidad :)
conectado
 
Page generated in 0,06879 seconds with 12 queries