Kim Jong-Il mirando un pepino.
El líder norcoreano Kim Jong-il, más conocido en las fronteras del norte de Corea como “Querido Líder” o simplemente “Líder Supremo”, ha muerto a los 69 años. Había sufrido una apoplejía en agosto de 2008 y desde entonces había numerosos rumores sobre su salud. Por entonces ya decidió quién prolongaría la única dinastía que queda en el mundo, que él mismo heredó a su vez de su padre, Kim Il-sung, en 1994. Su hijo, cariñosamente ya apodado como Nº3, se hará cargo de un polvorín de país que deja escuetas estampas del régimen saliente para la posteridad.
Así es como quedará graficamente para el recuerdo Kim Jong-Il, por sus contadas y estrambóticas apariciones públicas, mirando líneas de producción con detenimiento, pasando revista a ejércitos de trabajadoras en perfecta formación; o incluso llegando a probar las viandas y los bebestibles que ofrece la casi yerma tierra en que ha convertido el país. El afinado líder coreano Kim Jong-Il era hombre de pocas palabras. Acompañado de una cohorte de consejeros solía acudir a escuelas, factorías y cuarteles, a escuchar las explicaciones de sus súbditos. Y le gustaba mucho mirar, sobre todo mirar. Y en esa pose le recordaremos en Strambotic for ever: Mirando unas katiuskas
Kim Jong-Il mirando cosas ha recopilado un titipuchal de estas imágenes, un fresco que no necesita de palabras para retratar la naturaleza del régimen de Pyongyang. Este es el álbum póstumo de un señor al que particularmente recordadermos por combinar gafas de Karl Lagerferd con traje de David Delfín, por estar siempre listo para pasar revista a sus subditos y cuya imagen que ha plasmado en nuestra retina vale, por supuesto, más que mil palabras. Mirando un kebab
Kim Jong-Il, mirando unos filetes.
Mirando una mazorca.
Mirando crecer el trigo
Miran una pared.
Mirando unos chicles.
Mirando unas soldadas.
Mirando un nabo.
Mirando unas vacas.
Mirando un mapa.
Mirando unas galletas.
Mirando un buffet.
Mirando un espejo.
Mirando unos pescados.
Mirando una maquina de coser.
Mirando una puerta.
Mirando cosas que venden. 
Mirando la playa.