Cualquiera diría que el asiento trasero de un carro de la policía no es el lugar más idóneo para disfrutar del sexo, pero una pareja arrestada en Texas bajo el cargo de posesión de drogas parece pensar todo lo contrario.

Howard Windham y Tina Marie Arie iban esposados, en el carro de un agente de la policía del condado Montgomery, mientras los trasladaban a la cárcel. Pero aún en esa situación tan incómoda se las arreglaron para que él se desabotonara el pantalón y se lo bajara lo suficiente para que ella le practicara sexo oral, un acto que, como comenta el Huffington Post, llenaría de envidia hasta al famoso escapista Houdini.

El policía notó que algo extraño estaba ocurriendo en el asiento trasero cuando vio por el espejo retrovisor la cabeza de Tina sobre las piernas de Windham. Ella explicó que se sentía cansada, pero el oficial se dio cuenta de lo que pasaba y les ordenó terminar de inmediato su placentera actividad.

La pareja había sido arrestada en un restaurante de cadena rápida, mientras llevaban consigo docenas de frascos de pastillas de calmante que solo se venden por receta médica.