Desde hace un día, el disidente está privado de su libertad sin ninguna acusación formal. Fue arrestado, junto a otros activistas, cuando acudió a un hospital para visitar a un opositor en huelga de hambre





Guillermo Fariñas, Premio Sajarov 2010 del Parlamento Europeo, fue detenido el martes cuando intentaba ingresar a un hospital de la ciudad de Santa Clara, según informó su madre, Alicia Hernández. Un día después, aún no le formularon cargos.

"Está en el mismo lugar, en la quinta estación de la Policía Revolucionaria" en Santa Clara, dijo Hernández, tras explicar que le envió "con un tío" los anticoagulantes y otros medicamentos que debe tomar por los problemas de salud que le generaron las huelgas de hambre que realizó.

"Me acabo de comunicar con el oficial que lo atiende y me dijo que estaba esperando la orden de los superiores para ponerlo en libertad, que esperaba que fuera hoy mismo, en la tarde de este miércoles, así que vamos a esperar", añadió.

Fariñas fue detenido junto a otros activistas que acudieron a visitar a Alcides Rivera, un disidente en huelga de hambre, señaló Elizardo Sánchez, de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional.

Al momento del arresto, un agente tomó a Fariñas, "lo sujetó, lo inmovilizó y otro le dio golpes", indicó su madre, quien afirmó que ésta es la primera vez que su hijo es golpeado por la policía, pese a que ha sido arrestado anteriormente.

"Hasta ahora seguía detenido, ya está llegando a las 24 horas, y existe preocupación porque fue agredido físicamente, lo cual no es tan común en casos como el de él. Parecía que eran elementos parapoliciales que no tenían instrucciones precisas" para proceder, declaró el activista Sánchez.

Alicia Hernández dijo que la policía le informó que a su hijo "le habían dado los medicamentos" que le envió. También afirmaron "que estaba muy tranquilo y que iban a llamar al médico para que lo chequeara, pero no me dijeron si era que se sentía mal o si era un chequeo de rutina", agregó.

La mujer explicó que Fariñas tiene una salud "muy precaria", pues padece de "polineuropatía nutricional crónica" como consecuencia de sus huelgas de hambre. En total, el disidente inició unos 25 ayunos. El más recordado fue el de 2010, cuando mantuvo la protesta durante 135 días, lo que le provocó severos daños a su salud.