Dos reos planean fugarse a través de un túnel que da a una coladera en la calle. Pero, sin que los convictos lo adviertan, la policía los está esperando con la macana lista.
Al primero en salir le asestan tremendo macanazo en el hocico que éste se devuelve y tapándose la boca se dirige al otro:
"Salga usted primero que a mí me ganó la risa".