Florentino Pérez y sus 10 millones de euros netos por temporada acabaron por decantar la voluntad del jugador
Neymar escoge el dinero del Madrid

El Bernabéu ya tiene a su anti-Messi. El club echó el resto y vació sus arcas en otro fichaje a la desesperada



Neymar


La chequera entró en juego y despejó las dudas que Neymar albergaba sobre su futuro. Florentino Pérez echó el resto para evitar otra sonora derrota frente al Barça en una mesa negociadora. Con argumentos deportivos de por medio, el presidente del Real Madrid había asumido que Sandro Rosell le había ganado la partida en la batalla por atar a la promesa brasileña del Santos. Cosa lógica y normal si tenemos en cuenta el actual proyecto deportivo azulgrana en comparación a los continuos fracasos cosechados en el Santiago Bernabéu. Pero en una negociación tan compleja, no todo se reduce a fútbol y sentimientos.

Florentino lo sabe bien, y ahí se mueve como pez en el agua. Dólares y euros en mano, el Real Madrid está convencido que en las próximas horas Neymar anunciará de forma oficial que será jugador blanco a la finalización de los Juegos Olímpicos de Londres el próximo verano.
Los acontecimientos se han precipitado de forma vertiginosa en las últimas horas. Por un lado, el diario `Estadao¿ desvelaba un factor decisivo en toda la negociación. A medianoche del pasado sábado, Neymar abandonaba el centro hospitalario Sao Luiz tras someterse a un reconocimiento médico. De forma paralela, desde Madrid se confirmaba la presencia de una amplia delegación ejecutiva en tierras brasileñas. Todo concordaba. Neymar fue chequeado bajo la supervisión directa de Carlos Díez, responsable de los servicios médicos del Real Madrid, mientras aguardaban Javier López Farré, responsable de los servicios jurídicos de la Casa Blanca, Julio Senn, asesor jurídico de Ronaldo, y, por descontado, el ínclito Wagner Ribeiro y el padre del futbolista.
A falta de argumentos futbolísticos, Florentino Pérez ha optado por poner en juego a toda su artillería pesada. Es decir, billetes, billetes y más billetes. En un breve contacto informal con los medios de comunicación, el representante Wagner Ribeiro se jactaba de su éxito final. “Ha sido muy complicado pero en los últimos días hemos conseguido dar la vuelta a la situación”. Un reconocimiento explícito que Neymar y el Santos se habían decantado por la propuesta deportiva del Barça.
Los primeros números de la operación ya se han filtrado. El Santos percibirá alrededor de 60 millones de euros en concepto de traspaso. Una cantidad que tanto Real Madrid como Barça estaban dispuestos a asumir. Pero los cambios sustanciales han llegado en el capítulo de honorarios al jugador e intermediarios varios. Ahí Florentino ha vuelto a hacer gala de la generosidad con la que administra el dinero de su masa social. Según la prensa brasileña, la gran contraoferta presentada por el Real Madrid para contrarrestar el acuerdo de Neymar con el Barça no era otra que la seducir al futbolista con 10 millones de euros netos por temporada, más bonificaciones varias en función del rendimiento individual y colectivo. Un contrato de superestrella para un gran promesa. La historia no deja de tener su gracia si analizamos la evolución de la propuesta madridista en solo cuestión de meses. De las cuatro millones y medio de euros iniciales se ha pasado hasta unos escalofriantes diez millones por temporada. Cifras mareantes y casi prohibitivas para el Barça en plena política de austeridad.
En Can Barça estaban al corriente de todos los movimientos del Real Madrid y la decisión no les ha cogido por sorpresa. Tanto por boca del presidente del Santos, Luis Álvaro de Oliveira, como por el entorno del futbolista, la directiva azulgrana estaba invitada este mismo fin de semana a hacer un esfuerzo final para compensar al jugador. Pero Sandro Rosell dijo no. El club no ha estimado oportuno participar de la subasta del delantero y encarecer aún más una operación de futuro que conlleva cierto riesgo.
Neymar anunciará en breve que acepta la oferta del Real Madrid. Probablemente apelará al compromiso de su agente adquirido hace meses y recurrirá a los tópicos de la grandeza del club, etc, etc, etc. La realidad es que el futbolista ha sucumbido a los encantos del dinero. Los diez `kilos¿ del generoso Florentino bien valen un cambio de criterio. Wagner Ribeiro y los múltiples asesores que han presionado hasta la saciedad pueden respirar más tranquilos. El negocio no se viene abajo y el Real Madrid compensará sus esfuerzos con suculentas partes del enorme pastel del traspaso de Neymar.