Hay mujeres que con un vistazo dejan satisfechos los sentidos. Hay otras, como Natalia, que deben repasarse, degustar cada rincón para saber a ciencia cierta si en verdad existen, porque a veces no se cree posible que los genes se hayan dado semejante banquete.

¿Qué me gusta de Natalia? Lo primero es que tiene clase




Su cabello, definitivamente su cabello marca la diferencia... ensortijado, cayendo a borbotones en un delicado erotismo que sube la temperatura




Pero también atrae ese aire provocador...




...que luego se vuelve un vendaval con su exuberante cuerpo




Para después sorprender con su mirada fresca, pero retadora...




Y cuando se cree que se ha visto todo es cuando muestra su rostro de delicadas facciones, de mirada tierna y labios entreabiertos, dejando una invitación a seguir tras sus pasos




que lo llevan a cualquier parte, incluso a una vieja fábrica, que busca como pretexto para mostrar su espléndida belleza




o a un paseo en compañía de sus amigas...




o de regreso a las travesuras infantiles...



Y es entonces cuando puede uno decir que sabe algo de Natalia... o por lo menos que ha percibido su aroma de mujer...

Felicitaciones por los primeros 30.000 de reputación.