El regreso de Puyol permitirá al de Badia abandonar el eje de la cobertura
Busquets regresará al mediocentro Guardiola recupera a los mimbres suficientes para olvidarse de los experimentos y devolver a cada uno en su sitio
Busquets solo ha jugado una vez esta temporada de pivote
El calvario defensivo de Sergio Busquets puede haber llegado a su fin. El regreso de Puyol y la recuperación de varios efectivos de la maltrecha defensa azulgrana permitirán a Pep Guardiola paliar las eternas revoluciones de la cobertura azulgrana. Salvo nuevos imprevistos, el técnico ya dispone de suficientes efectivos en su zaga para aparcar temporalmente el reciclaje de centrocampistas como el de Badia. Mascherano es la única excepción. En primer lugar porque Piqué continúa convaleciente de sus problemas musculares pero, además, el argentino sigue sorprendiendo con su excelente adaptación a la nueva demarcación. A Busquets, como quedó patente frente al Milan, la reubicación le genera mayores contratiempos.
La consolidación de la clásica defensa del Barça no solo beneficiará a la contundencia defensiva del equipo sino que permitirá al centro del campo recuperar a uno de sus pilares 'olvidados'. En los primeros seis encuentros oficiales de la temporada, Keita ha sido uno de los jugadores que más minutos ha acumulado. Ahí va un dato irrefutable: cinco titularidades frente a solo un encuentro en el que Busquets ejerció como pivote defensivo.
Nadie cuestiona que el centrocampista africano es un tipo solvente donde los haya. El malí ha hecho gala de una colocación espectacular y su regularidad ha sido una constante. Guardiola le ha aludido en más de una ocasión con comentarios de lo más elogiosos respecto a su aportación al bloque. Keita ha rayado a gran altura, pero a Sergio Busquets se le echa de menos en el centro del campo. El canterano, en su posición natural, ha demostrado una amplia gama de recursos que le han llevado a convertirse en uno de los mejores mediocentros del momento. Su progresión ha sido espectacular y junto a los Xavi, Andrés Iniesta y compañía han configurado un centro del campo brutal.
A expensas de lo que pueda suceder con Javier Mascherano y la posterior evolución de la enfermería, de ahora en adelante el Barça estará en condiciones de recuperar a su imagen clásica: con centrales naturales y Sergio Busquets y Keita aportando consistencia a la zona ancha. Elementos fundamentales que han pasado factura en la mayoría de los seis partidos oficiales jugados durante las primera semanas de competición.