si por supuesto que tienes razon, los que manejan los animales casi nunca son los propietarios y de ellos deviene en algunos casos el mal trato, pero a lo que voy es que el maltrato deliberado no es una politica generalizada en el sector pecuario. sostengo la tesis contraria: buenos cuidados, buena alimentacion y buenas condiciones en las areas de levante es la garantía que tiene el productor de obtener ganancias de su inversión. Los animales de granja, hay que entenderlo, no son vistos como mascotas ni por los dueños ni por los criadores, son solo inversiones, que solo se rentabilizan con el sacrificio o la reproducción.

rechazo en todo sentido el maltrato animal, más si este se realiza con el solo objeto de hacer sufrir el animal, pero procesos pecuarios ampliamente difundidos y con objetivos claros tales como la castración, el descolmillado, la cortada de los picos en las aves, son necesario en el marco del concepto de producción pecuaria.

las discusión del maltrato animal me recuerda al amargo argumento de los defensores de la tauromaquia, en el sentido de que si no fuera por el morboso espectaculo del toreo, el toro de lidia como raza desaparecería pues a diferencia de las demas razas vacunas, este animal no sirve para nada en un hato, salvo de entregar su vida en el ruedo.

asi entonces se observa una relación paradojal entre la subsistencia de la especie y su sacrifio en la plaza. subsiste como tal mientras se pueda torturar como espectaculo. una vez que el espectaculo termine definitivamente, la raza desaparece casi de inmediato.

así entonces apartandonos del dolor evidente que muestran los animales, de la imagen impresionante y bizarra de estos bañados en su propia sangre. su sacrificio al menos tiene un proposito, lo que no se predica de los millones de hombres y mujeres y niños que mueren en el mundo simplemente por politica.