Dentro de cinco días, el mercado estival bajará el telón y, salvo sorpresa mayúscula, Kaká seguirá siendo futbolista del Real Madrid. Y no por falta de pretendientes, que los tiene y muy variados, sino por la actitud del conjunto blanco, que no parece dispuesto a malvender al centrocampista canarinho.

Y es que, según relata el diario As, la directiva del conjunto merengue sólo contempla la venta de este futbolista si algún club aparece en las oficinas del Santiago Bernabéu con una oferta que ronde los 50 M€, cantidad que se antoja inasequible para cualquiera de los equipos que ha preguntado por él.

De hecho, la entidad que más interés ha mostrado en el jugador, el AC Milan, se ha plantado en 20 M€, y esa es una cifra que apenas genera inquietud en los dirigentes madridistas.

Queda por ver si el Paris Saint-Germain, escuadra que ayer mismo mostró su deseo de convertir a Kaká en la guinda de su ambicioso proyecto (ver artículo), es capaz de presentar una oferta que resulte tentadora, aunque no parece que los galos dispongan ya del capital necesario para cerrar esta operación