"No soy Harry Potter, no tengo una bola de cristal y no sé hasta dónde podrá llegar la Roma". Son las palabras de Luis Enrique, técnico de la Roma, que ha recordado a Jose Mourinho cuando éste expresó los mismos términos tras el empate contra el Mallorca en su debut liguero con el Real Madrid.

"Soy optimista a la vista de lo que veo en los entrenamientos", explica Luis Enrique. El español en declaraciones a la Gazzetta dello Sport, sin embargo, no quiere hablar sobre objetivos de cara a la próxima temporada. En parte porque la plantilla aún no está cerrada según sus propias palabras, tanto en el terreno de fichajes como el de posibles ventas.

El que si parece que cuenta para 'Lucho' es Cicinho, que a pesar de ser descartado y cedido al Villarreal la temporada pasada, parece que "se está entrenando bien y si consigue un punto óptimo de forma seguirá con nosotros".

"El que no esté involucrado e identificado con el proyecto es mejor que se vaya", ha asegurado por otra parte el asturiano sobre la marcha de Vucinic a la Juventus. Luis Enrique ha querido expresar su deseo de que Daniele De Rossi, que suena con fuera como recambio por Sneijder para el Inter de Milan, renueve su contrato con el club que expira en junio de 2012.
La llegada de Luis Enrique al banquillo romano, junto a la incorporación de nuevos fichajes como Bojan Krkic, Gabi Heinze, Erik Lamela o Maarten Stekelenburg han generado ilusión entre los aficionados, que no en vano se han llevado un chasco con la salida de Mirko Vucinic rumbo a la Juventus de Turín.