La última vez que el dólar estuvo por encima de la barrera de los dos mil pesos fue hace trece meses. El pasado 5 de junio del 2010 la divisa cerró en $2.021,21 y desde ese día no ha vuelto a recuperar el terreno perdido.



Si se observa el comportamiento del dólar desde principios del año 2010, se percibe una pérdida
superior al 10% respecto del peso colombiano


Hoy, cuando arrancamos el octavo mes del 2011, la Tasa Representativa del Mercado, TRM, está en $1.777,82, es decir, $243 menos que lo que valía hace más de un año.

Si se analiza el comportamiento de la moneda estadounidense en lo corrido de este año, se observa una caída de $136. En términos técnicos eso quiere decir que el peso colombiano se ha revaluado 7,11% en casi ocho meses.

El asunto es que todo parece indicar que la tendencia a la baja del dólar seguirá su camino, pues están ingresando muchos dólares por inversión extranjera, debido a que nuestro país es atractivo para invertir, según coinciden en decirlo algunos analistas y empresarios colombianos.

Incluso, algunos se atreven a decir que el dólar podrá bajar aún más, por debajo de los $1.700, toda vez que muchos inversionistas extranjeros tienen su mira puesta en los sectores minero y petrolero, tal como ha venido ocurriendo en los últimos meses.

Sólo en el 2010, los sectores minero y petrolero participaron con el 67% de la inversión extranjera, de acuerdo con Proexport. En dinero, ese porcentaje equivale a no menos de US$2.800 millones.

El impacto

Los más afectados por estos días son los exportadores colombianos por la fuerte caída del dólar frente al peso.

Y como dicen los analistas, la moneda podrá seguir su camino descendente, entre otras razones porque el Banco de la República no realizará más intervenciones en el mercado, a parte de los US$20 millones que compra a diario.

Directivos de Ascoltex se muestran preocupado por la situación, pues desestimula las exportaciones. Señalan que ni el Gobierno ni el Banco de la República se han comprometido para cambiar la tendencia.

Mientras siga un ritmo de inversión extranjera fuerte y el Gobierno continúe monetizando divisas, será imposible contener la situación.
A escala internacional el panorama es delicado. El dólar sigue por debajo del yen japonés.

La semana pasada, tras intercambiarse en la banda de los 78 yenes en la apertura del mercado la moneda estadounidense cayó temporalmente por debajo de esa barrera hasta 77,96 unidades.

Los entes más importantes de Colombia en investigación económica, Anif y Fedesarrollo, coinciden en afirmar que este año el dólar bordeará la barrera de los $1.800. Si esa previsión se cumple, los empresarios, especialmente los exportadores, tendrán que entender que la divisa no volverá a los $2.000.