Denunciante Bronce
| Paraíso litoral
Calificación: de
5,00 | Namibia es un óptimo modelo de gestión del
territorio y sus reservas naturales.
Una duna elevada, teñida de naranja por la luz matinal, sirve de telón de fondo de unas
acacias eriolobas en el Parque del Namib-Naukluft.
Las dunas de Sossusvlei se elevan centenares de metros por encima del suelo arcilloso
del Parque del Namib-Naukluft. El nombre de Sossusvlei, una combinación de afrikaans y
la lengua nativa nama, significa algo a sí como "ciénaga sin retorno", en referencia a la
prácticamente nula aportación de agua de lluvia.
En el Parque Nacional Sperrgebiet, una hiena parda transporta el cadáver de un
cachorro de león marino bajo la mirada de un chacal. No es fácil fotografiar a las
solitarias hienas, de las que hay menos de 1.200 en Namibia y 8.000 en toda África.
Los leones marinos del Cabo toman el sol en Cape Cross, un promontorio rocoso de la
costa de los Esqueletos, llamado así por una cruz de piedra que erigió el explorador
portugués Diogo Cão en 1486. Más de 200.000 leones marinos del Cabo (la mayor
colonia de cría de Namibia) empiezan a frecuentar el lugar cada mes de octubre, con el
fin de aparearse.
Los flamencos comunes se congregan en las aguas de Sandwich Harbour. Antiguamente
esta desolada laguna ubicada dentro del Parque del Namib-Naukluft fue un remoto
fondeadero para buques balleneros. En la actualidad es un lugar famoso por su
abundancia de aves, en el que se ha registrado más de un centenar de especies.
Los áloes dicotomos se alzan como centinelas fantasmagóricos bajo las estrellas del
desierto de Namib. Las flores de esta variedad de áloe proporcionan néctar a las aves y
los insectos.
Los elefantes que habitan en el desierto siguen el antiguo valle del río Huab,
atravesando los paisajes eternos de Torra Conservancy, una de las aproximadamente
60 zonas supervisadas por comunidades locales.
Una estrategia de supervivencia del desmán (Chrysocloris asiatica) del Parque Nacional
Sperrgebiet consiste en "nadar" justo por debajo de la arena. A pesar de su aparente
desolación y aridez, esta zona costera es un enclave de gran biodiversidad, hogar de
reptiles, antílopes, leones marinos, hienas pardas y cerca de 800 especies de plantas,
234 de las cuales no crecen en ningún otro lugar del planeta.
Este grupo de pingüinos de El Cabo se refugia en una construcción de la isla Halifax,
parte de un santuario marino frente al Parque Nacional Sperrgebiet
Durante miles de años el viento ha esculpido la arena del desierto de Namib, creando
algunas de las dunas más altas del mundo, teñidas de rojo por el óxido de hierro. La
arena contiene suficiente humedad para dar sustento a unas cuantas plantas
resistentes. Cerca de esta duna hay otra, conocida como Big Daddy, que se eleva 350
metros por encima del suelo del desierto.
__________________ "Aún hay vagos destellos de civilidad en este matadero salvaje que alguna vez fue la humanidad". |