Miembros del frente 34 tomaron un pasaje rural del departamento de Chocó, donde viven
más de 200 personas. El alcalde de
Medio Atrato alertó que
se están quedando sin comida. El Gobierno ordenó desplegar más tropas
Crédito foto: EFE
El noroeste colombiano se encuentra
conmocionado desde el sábado, cuando un grupo de guerrilleros se hizo con el control de un sector rural conocido como Las Mercedes, perteneciente al municipio de
Medio Atrato, tras asesinar a un policía y tres civiles. Los miembros de las FARC retienen, desde entonces, a un número no determinado (según distintas versiones oficiales oscilaría entre 200 y 250) de civiles, a quienes estarían utilizando como
escudos humanos para defenderse de las Fuerzas Armadas.
El alcalde de Medio Atrato, Luis Moreno,
calificó este martes de "delicada" la situación que se vive en esa región del departamento de Chocó. Según dijo, el cerco tendido por la narcoguerrilla comenzó a producir escasez. "Se están quedando sin alimentos", explicó Moreno, quien pidió ayuda al gobierno central.
Por su parte, el defensor del pueblo en Chocó, Víctor Mosquera, señaló que la cifra de personas perjudicadas por el cerco puede ascender a 4 mil.
Las FARC ordenaron al grupo de civiles que se encuentra retenido no salir de la zona. Advirtieron que en caso de intentar escapar por el río Atrato,
serán blanco de disparos.
En medio de la tensión, las fuerzas de seguridad y las autoridades de gobierno exhibieron discrepancias al momento de definir la situación. Mientras que el comandante de las Fuerzas Militares, almirante Édgar Cely, negó que esos civiles estuvieran retenidos, el ministro del Interior y Justicia, Germán Vargas Lleras, pidió "que no anden con eufemismos" y
aseguró que lo que ocurre en esa región es un secuestro masivo.
Miembros de la fuerza pública se encuentran en el casco urbano de Medio Atrato, pero
no se han dirigido aún hacia el caserío de Las Mercedes, donde los civiles se encuentran cercados.
El ministro de Defensa, Rodrigo Rivera, ordenó este martes que se refuerce la seguridad del lugar con otros 200 efectivos mientras se determina cuál es la estrategia a seguir. "Estamos recogiendo recursos para la zona.
Son unos bandidos que se aprovechan para atentar contra la población civil", añadió el ministro.