El gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, Luis Genaro Muñoz, sorprendió esta semana con la entrega de cifras optimistas sobre el resultado de la producción nacional que el gremio espera para este año. Cuando otros sectores de la agricultura están estimando sus datos a la baja, la Federacafé indicó que al final de 2011 Colombia alcanzará a producir 9,5 millones de sacos, lo que cerraría un periodo de dos años de indicadores menores (7,8 y 8,9 millones en 2009 y 2010, respectivamente).

Muñoz explica ese estimado por la conjugación de dos factores: las condiciones de buenas prácticas que está generando la Federación, especialmente con la restitución de cultivos, y el incremento del mercado de consumo mundial, que no alcanza a ser satisfecho por los inventarios existentes.
El momento histórico es visto de manera tan positiva por la Federación, que su gerente no duda en confiar en que en pocos años la producción anual de sacos puede llegar hasta los 18 o más millones de sacos por año, mientras se continúe el plan actual y el mercado internacional siga expandiéndose. Luis Genaro Muñoz habló acerca del estado del sector cafetero.

- Sorprendió usted esta semana con el anuncio de las cifras estimadas de producción para 2011. Después de dos años bajos, reaparecen los datos optimistas…
Colombia viene atravesando periodos difíciles de rentabilidad y de clima y ahora estamos enfrentando la peor ola invernal de muchos años, todo eso, desde luego, ha impuesto dificultades. Pero vemos un clima mejorando, por un lado, y un mercado creciendo, por el otro. Entonces, Colombia tiene oportunidades de mercado, oportunidades de incrementar su participación en los mercados de alta calidad, de consolidar su posición y de recuperar la producción.

- La perspectiva es que en poco tiempo Colombia llegue a sus cifras de producción de 2007 y 2008, sus mejores años de la década pasada…
Creo que sí, con renovaciones cercanas a las 130.000 hectáreas por año, que son nuestras metas, en condiciones normales Colombia podría estar el próximo año en los niveles de once millones de sacos y de ahí en adelante ir creciendo. Renovando el 90% de la caficultura, llegaríamos a unos catorce millones de sacos. De cara al mercado, ya implementaremos estrategias de crecimiento de áreas para seguir ascendiendo, por qué no, a 18 millones de sacos.

- Otro dato interesante que usted aporta es que se ha estabilizado para las variedades de granos suaves, como el colombiano, un precio piso internacional de dos dólares. ¿Cómo se llega a esa conclusión?
La demanda creciente en el consumo, bajos inventarios y producciones con nuevos retos en todos los países, han generado que los precios, estructuralmente, hayan subido y se hayan equilibrado. Ahí es donde nos parece que se ha conformado un nuevo piso para el café de Colombia, que debe estar en los dos dólares por libra.
- ¿Cómo ha resultado afectada la producción por causa de esta ola invernal, considerada la más fuerte de muchos años?
El cálculo de haber perdido un millón de sacos se desprende de que los niveles de infección por roya pueden estar cobrando el 20% de la producción normal del país; ese fue el cálculo para el año pasado. Este año, también con condiciones adversas, Colombia perderá de su potencial teórico normal otro 20%. ¿Qué se debe hacer? Combatir la enfermedad por las vías de mejores prácticas agrícolas y sembrar variedades más resistentes.

- ¿Ya hay un cálculo exacto de cómo van esas pérdidas en la primera parte de este año, por las lluvias?
Es difícil calcularlo así, pero en condiciones normales Colombia debería tener, igualmente, un año más con producción de sacos superior a la que vamos a tener, es decir, llegar a 10,5 millones de sacos. Por qué no se tienen, por la severa afectación del clima. Nuevamente, el país no recuperará un millón de sacos este año.

¿La meta se mantiene pese a las lluvias?
Sí. A lo largo del año ya llevamos tres millones de sacos, con razonabilidad podemos creer en un millón y medio más para el resto del primer semestre y el siguiente lo esperamos mejor, hubo cuatro floraciones que fueron buenas, hay optimismo, esperamos una producción más esparcida a lo largo de los meses, podíamos llegar en ese tiempo a otros cinco millones de sacos. Con esos comportamientos llegaremos al estimado de 9,5 millones de sacos en 2011.

- La Federación y Colombia Humanitaria han anunciado un plan de apoyo en dinero a los cultivadores afectados por el invierno, ¿de cuánto es ese esfuerzo?
Se han aprobado $57.000 millones para atender a 221.000 familias, que son cafeteros que tienen a su cargo 190.000 hectáreas, es decir, todos son pequeños productores.