Cuando Abraham va a la escuela, descubre que es el único niño judío en la clase; pero como era un pueblo decente nadie lo molestaba. Un día, la maestra pregunta a la clase:
"¿Quién es la persona más admirada que jamás haya vivido y por qué?"
Para hacerlo más interesante sostiene un billete de 20 dólares en la mano y promete:
"Quien dé la mejor respuesta obtendrá estos 20 dólares".
Todos los niños empezaron a decir lo que ellos pensaban.
"George Washington, porque es el padre de los Estados Unidos", dijo uno.
"Eso está muy bien".
"Abraham Lincoln, porque liberó a los esclavos", sugiere otro.
"Muy bien".
"Juana de Arco, porque salvó a Francia", asegura una niña.
"Otra excelente opción", acepta la maestra.
Entonces Abrahamcito levantó la mano. La maestra le interroga:
"Abraham, ¿quién crees que fue la persona más admirada que jamás haya vivido y por qué?"
"Jesucristo", responde Abraham.
Impresionada, la maestra responde:
"Abraham, estoy muy sorprendida. Clase, yo creo que todos estamos de acuerdo en que Abraham es quien debe obtener estos 20 dólares", y le da el dinero a Abraham.
En el recreo, la maestra sigue impresionada y le pregunta a Abraham que por qué Jesús.
"Mire, personalmente pienso que la persona más admirada que jamás haya vivido es Moisés, pero... business are business!"