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#1 |
Denunciante Mítico
 |  BMW 328 Hommage
Calificación: de
5,00
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BMW lo ha vuelto a hacer. El fabricante muniqués, que participa desde hace años de forma muy activa en el Concurso de Elegancia de Villa d'Este, ha conseguido volver a desencajarnos la mandíbula con con la recuperación de otro sus más grandes mitos de cara a la prestigiosa cita italiana: el BMW 328. Su otrora sofisticadísimo roadster, que aparece de forma indefectible en todas listas dedicadas a enumerar los mejores clásicos de todos los tiempos, cumple este año 75 primaveras, y para celebrar su gloriosa senectud el fabricante se llevará a Villa d'Este al avanzado 328 Hommage, una interpretación en clave moderna del campeón de las Mille Miglia.
Este peso pluma conceptual, que recoge el testigo del más actual pero no menos pasmoso M1 Hommage de 2008, ha sido creado siguiendo las pautas del 328 original, con una construcción de plástico reforzado de fibra de carbono que, si bien no existía en los años 30 (cuando BMW optó por el aluminio y el magnesio), consigue dejar su masa en 780 kg. También sirve para reflejar (y promocionar) el interés de BMW en los materiales compuestos de bajo peso, que formarán la espina dorsal (literalmente) de sus próximos lanzamientos.
En un guiño al 328 original, el Hommage recupera los riñones verticales del clásico, que prácticamente saltan de su parrilla para trepar hacia el capó. La cinta negra de los faros es emulada visualmente mediante concavidades en forma de equis, y hasta las pasmosas llantas de este homenaje (de aluminio mecanizado negro, con cubiertas de fibra de vidrio pintada en gris metálico) recuerdan a las del coche de la preguerra. Hasta las correas de cuero usadas para sujetar el capó siguen en su sitio, aunque ahora como elemento puramente decorativo.
Bajo las mismas, BMW ha tomado la respetuosa decisión de no instalar un motor eléctrico. En lugar de otro propulsor a electrones, se encuentra un motor de 3,0 litros y seis cilindros en línea, que si bien no tiene cifras de prestaciones desconocidas, resulta casi una elección refrescante entre tanto prototipo a baterías. Donde ya hace más concesiones a la modernidad es en el equipamiento, con dos iPhones en sendas fundas especiales haciendo de instrumentación, e incluso un botón de corte para los sistemas electrónicos entre sus dos asientos. El tablero guarda en todo momento un aire minimalista acorde con el resto del vehículo, y guiños como el retrovisor central de su parabrisas asimétrico son para enmarcarlos.
No vamos a mentir: nos seguimos quedando con el clasico... pero eso no quita para que podamos apreciar al Hommage como el gran concept que es.
Imágenes:
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