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 Denunciante Leyenda
 |  La venganza se sirve en un plato llamado YouTube (LLEVE POR RATA)
Calificación: de
5,00
 | Malos tiempos para los amigos de lo ajeno. Robar un gadget high tech puede tener consecuencias desastrosas, sobre todo si no se cuenta con conocimientos sobre nuevas tecnologías. Si no, que se lo cuenten a nuestro protagonista de hoy, que ha padecido en carne propia el lado más oscuro de la fuerza de las redes sociales. Todo comenzó cuando el estudiante Mark Bao dejó por un descuido su flamante portátil en la recepción de la universidad norteamericana de Bentley. Es aquí donde un joven -famoso ya en todo el planeta- aprovechó el descuido llevándose consigo el portátil de Bao. Hasta aquí, se trataría de una noticia anodina que no alcanza ni para un buen titular: un portátil más robado en un campus. http://www.youtube.com/watch?v=8c8W1NDYf38&feature=player_embedded Sin embargo, el asunto cobraría un inesperado giro, puesto que Bao había instalado una aplicación en el portátil robado que hacía una copia de seguridad de todo el contenido del disco duro, y comprobó que ésta seguía recibiendo datos del ordenador sustraído. No tardó mucho en hacerse con la identidad del ladrón, su cuenta de Facebook y todo tipo de detalles personales. Pero de todo el sabroso contenido que logró reunir, le llamó la atención un vídeo, que sería a la postre la perdición de este ratero de poca monta. El tipo se había grabado a sí mismo bailando la canción Let it rain, empleando para ello la webcam del portátil. Bao se quedó fascinado y, antes de dirigirse a la comisaría más cercana a denunciar al ladrón, maquinó una venganza mucho más sutil pero demoledora: subió el vídeo a YouTube. El resto, lo puede imaginar: el vídeo enamoró a la audiencia y se convirtió enseguida en el más visto de la jornada, y en el momento en el que escribimos estas líneas, se acerca peligrosamente al millón y medio de visitas. La audiencia está encantada con las innegables dotes artísticas del ladrón pero, sobre todo, con el escarnio ‘social’ al que fue implacablemente sometido. La humillación pública pronto surtió su efecto y el ladrón suplicó a Bao que retirase el vídeo de YouTube, al tiempo que entregaba el ordenador en la universidad y se ponía a disposición de las autoridades. “Sé que no estoy en disposición de pedirte nada, pero por favor, retira el vídeo porque puedo perder el trabajo”, escribió a un implacable Bao. El cazador cazado y sometido a escarnio público, al tiempo que se sucedían los comentarios en los que se ridiculizaba al inesperado bailarín. Entre tanto, Bao sigue deshojando la margarita sin decidirse a retirar el vídeo. En este sentido, una de las propuestas que ha recibido le anima a sacar rendimiento del mismo: “Sé moderno: monetízalo”, le sugiere ChrisMatyszczykdesde CNET. http://www.elconfidencial.com/tecnologia/2011/ladron-estrella-youtube-20110329.html
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